Si estás un poco cansado de ver siempre igual tu cocina y quieres renovarla, no es necesario que hagas una gran obra y que te vayas de casa durante el tiempo que dure la misma: en realidad en solo un fin de semana puedes hacer que tu cocina cambie por completo.

Hay que destacar la importancia que tienen los muebles bien pintados con una elección acertada de color para que la cocina se vea bonita. La combinación de dos tonos, más oscuro para los muebles bajos y más claro para los de arriba, hace que el espacio disponible parezca mayor.

Mira las fotos de estas cocinas antes y después de la remodelación, y verás que todo lo que necesitas para tener un resultado perfecto es un poco de ideas e ingenio.

1. Usa dos colores contrastantes

Cambiar la fila superior de los muebles por unas repisas abiertas y pintar las paredes y los muebles en una gama "marina" requieren un esfuerzo mínimo, sin embargo, cambian completamente un interior aburrido y sin vida.

2. Pinta las fachadas de madera de un color más reservado

La pintura gris, que se usó para pintar las fachadas de la cocina, convirtió estos muebles comunes "de la abuela" en unos más modernos y con mucho estilo.

3. Haz que los muebles y azulejos sean del mismo color

Las fachadas renovadas usando pintura blanca y los azulejos del mismo color no solo hacen que la cocina luzca más iluminada sino también la hacen más amplia.

4. Agrega contraste y color

El truco de esta cocina no solo está en la armoniosa combinación de colores, sino también en la ventana improvisada, la cual agrega más luz y calidez a este pequeño espacio.

5. Acentúa las áreas de trabajo

Las superficies de madera en las áreas de trabajo lucen excelentes con un fondo blanco. Junto con otros accesorios no dejan que la cocina se convierta en un espacio estéril y sin vida.

6. Cambia los colores llamativos por unos neutros

La misma pintura blanca en vez de la naranja y los muebles superiores abiertos convierten una cocina anticuada en un espacio más moderno, que se ve más amplio y cómodo. 

7. Libera espacio

La parte superior blanca y la parte de abajo oscura son todo lo que se necesita para convertir una cocina aburrida en una que parece que salió de revista de decoración.

8. Dale al interior un aspecto estricto

Los muebles de esta cocina son los mismos, pero se siente como si el espacio hubiera sufrido cambios radicales, todo gracias a que se pintaron las fachadas y paredes de colores contrastantes y se agregaron un par de accesorios coloridos.

9. Dales una segunda oportunidad a los muebles viejos

Incluso el interior más viejo puede tener una segunda vida. Lo importante es elegir una gama de colores y accesorios adecuados.

10. Pinta las paredes de un solo color

Parecen dos cocinas diferentes. Pero, en realidad, los muebles no han cambiado, simplemente lo pintaron todo.