Una de las flores más bellas y coloridas, el tulipán es una planta bulbosa originaria de Asia Central que florece en primavera. Su nombre proviene de la palabra turca “dulban”, que significa "turbante", por su similitud con la forma que adopta la flor cuando está cerrada. 

Cuenta con más de 150 especies de diversos colores y tamaños y es utilizada para decorar cualquier espacio, ya que tiene la capacidad de crecer tanto en agua como en tierra. Por eso, una opción ideal para quienes no cuentan con grandes espacios o un jardín donde plantarlas, es cultivarlas en macetas o recipientes de vidrio.Además, el tulipán tiene la ventaja de ser una de las plantas más resistentes, por lo cual no requerirá grandes cuidados. 

Con la ayuda de estos prácticos consejos podrás alegrar tu hogar con los tonos de estas hermosas flores que le darán la bienvenida a la primavera. 

El cultivo de tulipanes es sencillo ya que sus bulbos contienen nutrientes suficientes, por lo que no necesitan cuidados excesivos. En regiones con inviernos muy fríos, se plantan a finales del otoño y florecen a mediados de la primavera. En cambio, en regiones cálidas suelen plantarse al comienzo de la primavera para florecer al comienzo del verano.Los tulipanes pueden llegar a medir entre 30 y 60 centímetros y sus flores tardan aproximadamente tres semanas en secarse. 

Entre las más especies más elegidas se encuentran: los darwin, botánicos o papagayos. Su gran variedad hace que puedan plantarse tanto en jardines, como en macetas de interior. Por eso, en principio debes decidir qué tipo de tulipán quieres. 

Antes de plantar

Puedes conseguir los bulbos de esta flor en cualquier vivero. Cuanto más grandes sean, mayor tamaño tendrá el tulipán.  
Una vez que los consigas, deberás incubarlos aproximadamente 12 semanas en el refrigerador porque son originarios de climas fríos. Este período de reposo debe respetarse para todos los bulbos por igual, independientemente del tipo de cultivo, en tierra o hidropónico (en agua). 

Cómo plantar tulipanes en macetas

1) La maceta que utilices debe ser lo suficientemente grande como para que los tulipanes puedan estar cómodamente ubicados y tener orificios en su base para facilitar el drenaje. Si plantas varios en el mismo contenedor, procura dejar 5 cm entre ellos.
2) Prepara el sustrato con tierra fértil. 
3) Ahueca donde se ubique cada bulbo en forma individual.
4) Planta los bulbos con las raíces hacia abajo. La profundidad de plantado debe ser 2 ó 3 veces superior a la altura del bulbo.
5) Cubre con el sustrato. 
6) Riega. 

Cultivo hidropónico

1) En lugar de maceta, utiliza un recipiente de vidrio. Cuida que tenga la boca bastante ancha como para que la cuarta parte inferior del bulbo esté en contacto con el agua. 
2) En la base, coloca algunas piedras y, por encima, los bulbos. 
3) Vierte agua en el recipiente. Solo la zona de raíces tiene que estar en contacto con ella y debes procurar cambiarla con regularidad. 
4) Coloca un puño de piedras extras alrededor de los bulbos. Asegúrate que estén hacia arriba y que las piedras no sobrepasen la mitad de su cuerpo.
5) Coloca el recipiente en un lugar con suficiente ventilación y luz.

Las raíces se encargarán de buscar el camino hasta alcanzar el agua del fondo. Después de 2 ó 3 semanas los bulbos empezarán a romperse y verás crecer el tallo .


Cómo cuidar los tulipanes

1) Luz. Deben recibir como mínimo 4 horas de luz natural. Los tulipanes son muy sensibles al calor y prefieren lugares con poca luz directa; elige un lugar con sombra o media sombra. 
2) Riego. Debes regar los bulbos de manera abundante una vez plantados en la maceta o en los recipientes de vidrio. El riego que requieren es moderado y regular. Evita los excesos de agua o sequedad.  
3) Temperatura. Una vez florecidos, la temperatura ideal debe rondar entre los 13 ° C y 18 ° C. En ambientes frescos la floración se conservará por más tiempo.
4) Frío. Cuida tus tulipanes de corrientes de aire o ambientes muy secos.
5) En el caso de utilizar recipientes de agua, deja el bulbo en un lugar oscuro durante aproximadamente un mes y medio y luego ubícalo junto a una ventanas para que reciba luz natural.

Una vez que la flor se haya marchitado, corta el tallo principal pero no las hojas, de esta forma el bulbo se fortalecerá para volverlo a utilizar. Cuando las hojas también se sequen, guárdalo hasta el próximo otoño para volver a plantarlo.

Frescura y color en tus ambientes

Los tulipanes son una alternativa para decorar el interior de tu hogar, incluso si cuentas con espacios pequeños. Además del color de sus flores, sus hojas también aportarán belleza con sus formas lanceoladas. Puedes ubicarlos sobre muebles de madera, de frente a ventanas o en macetas distribuidas en los ambientes a los que quieras llevar alegría y color. Además, si eliges cultivarlos en recipientes de vidrio tendrás un espectáculo natural del crecimiento de sus tallos, bulbos y raíces.