Tener mascotas es uno de los placeres de la vida de muchas personas. Un noble compañero de aventuras, fiel y divertido. Sin embargo, está cada vez más demostrado que el consumo alimenticio de las mascotas, igual que el de los seres humanos, tiene impacto sobre nuestro medio ambiente.

Gregory Orkin, un investigador de California, estima que todos los perros y los gatos (aproximadamente 163 millones) de Estados Unidos consumen una cantidad de calorías equivalente a 62 millones de personas, tanto como Francia o el Reino Unido.

Además, perros y gatos consumen en promedio más carne que los humanos, y estima que los perros y gatos estadounidenses fuesen un solo país, sería el quinto país que más carne consume en el mundo, detrás de Rusia, Brasil, Estados Unidos y China.

El consumo calórico de estas mascotas implica la emisión de dióxido de carbono, uno de los gases que contribuye al cambio climático. Se calcula que los perros y gatos estadounidenses producen tanto dióxido de carbono como 13 millones de automóviles.Nada de esto es culpa de las mascotas, obviamente, y la solución tampoco es deshacerse de ellas por completo.

El científico propone que incluyamos a nuestras mascotas en nuestros planes para vivir de forma sustentable. Algunas de las cosas que disminuyen nuestras emisiones dañinas son tener una dieta basada en vegetales, evitar los vuelos de avión, no tener automóvil y tener familias más pequeñas. Los perros también pueden tener dietas basadas en vegetales, pero los gatos no.

Considerando que el cambio climático agrava desastres naturales como los huracanes (el huracán Irma es un ejemplo reciente), disminuir nuestras emisiones dañinas empieza a ser una necesidad.

¿Piensas en todo esto a la hora de dar de comer a tus mejores amigos?