Si alguna vez has transitado el ciclo menstrual, puede que hayas experimentado el síndrome premenstrual: cambios de humor, sensibilidad física, antojos de comida, cansancio, irritabilidad y depresión son algunos de sus síntomas. Por lo general aparece una o dos semanas antes de la menstruación, y se va en sus primeros días. Si bien resulta muy molesto, no causa mayores problemas.

Existe una variación de este síndrome que resulta desconocido para la mayoría de las personas, pero para quienes lo padecen puede ser letal: el trastorno disfórico premenstrual. Entre el 5% y 8% de las mujeres en edad fértil tienen síntomas tan severos que hasta pueden llegar a ser fatales.

[También puede interesarte: Vulvovaginitis: ¿Por qué estar atenta a esto? Estas son sus causas, síntomas y tratamiento]

¿Qué es?

El trastorno disfórico premenstrual (TDPM) es una condición médica en la que sus síntomas, como la irritabilidad y la depresión severa, interfieren con la capacidad de una persona para funcionar normalmente. Quienes la sufren pueden sentir síntomas hasta tres semanas al mes, antes del comienzo de su período.

No se han encontrado las causas del TDPM, aunque es posible que los cambios hormonales que ocurren durante el ciclo menstrual de una mujer sean un factor importante.

Laura, de 38 años, notó por primera vez que había un problema cuando tenía 17. "Un día me caí", recuerda. "Estaba hiperventilando y mi madre llamó a los médicos para que me sedaran". Durante sus 20 sufrió ansiedad y ataques de pánico, y solo podía hacer trabajos temporales porque no lograba mantener uno estable. "Cada mes me cansaba tanto que tenía que dormir 18 horas durante tres días. Empecé a tener pensamientos suicidas", agrega.

Sarah, de 23 años, empezó a sufrir síntomas a los 14. "Tenía ansiedad y depresión y con el tiempo psicosis -veía y oía cosas- y manía". La hospitalizaron y le diagnosticaron trastorno bipolar. Se pasó un año entero entrando y saliendo de una unidad psiquiátrica hospitalaria para adolescentes.

Ambas tenían trastorno disfórico premenstrual, y tuvieron que pasar muchos años hasta encontrar un médico que las diagnostique correctamente.

Algunos otros síntomas pueden incluir falta de interés en las actividades diarias y en las relaciones con los demás, ansiedad, sentimiento de pérdida de control, problemas para dormir, ataques de pánico, problemas para concentrarse, irritabilidad o ira persistente, y dolores muy fuertes en las mamas, cabeza, músculos y articulaciones.

Afortunadamente, esta enfermedad es tratable. Además, es importante buscar ayuda psicológica. En estos casos también sirve mucho practicar ejercicio 3 veces por semana como mínimo, un descanso adecuado, tener una dieta balanceada, y realizar actividades como la meditación y el yoga.

Importante: Bioguía no brinda información ni consejos médicos y todo lo que se publica tiene la intensión de contribuir al desarrollo personal.

Fuentes:

BBC

Medline Plus