El objetivo principal es que puedas entender cómo las cosas pueden generar un vínculo emocional contigo de una forma poco saludable y que de ese modo puedas sanar tu relación con el entorno por lo tanto y así vivir de una manera más simple. ¡Comencemos!
La primera técnica que quiero compartir contigo está basada en la metodología de Marie Kondo ella es una autora Japonesa que ha logrado identificar como al momento de deshacernos de las cosas existe un proceso emocional por el cual atravesamos.
Mediante su técnica ella nos ayuda a que a clasificar las cosas que tienes y que así generar un entendimiento de la importancia que se les ha otorgado a dichos objetos, para que finalmente con gratitud puedas deshacerte de ellos.
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Abre tu mente: escucha a tu corazón
Quizás al leer esto ya te esté causando una leve ansiedad pensar en cosas que ya no utilizas o que realmente no son importantes en tu vida, en cuanto a utilidad pero sí en cuanto a emocionalidad.
Los seres humanos tendemos psicológicamente hablando, a trasladar nuestras emociones hacia lo material, en el momento que ocurre este proceso inconsciente lo que en realidad está pasando es que se busca evitar la confrontación de dichas emociones y es allí en donde el proceso de acumulación se puede dar con mayor facilidad.
Ella menciona que necesitamos aplicar gratitud y apreciación. Gratitud por las experiencias que esto nos ha otorgado y apreciación por poder tener aún más herramientas u objetos para continuar experimentando momentos de valor emocional. Te invito a que pongas esta técnica en prueba y que realices un poco más de investigación acerca de la técnica que ella nos proporciona.
Como segundo aspecto te recomiendo que puedas ir poco a poco identificando en qué categorías tiendes a acumular más o adquirir mayor cantidad de objetos, puede ser que en tu caso sea la ropa o quizás sea muebles, cuadernos, mochilas, libros. ¿Qué es lo que más tienes en tu casa?, si pudieras identificarte con un objeto, ¿Cuál sería este? una vez que has podido localizar la categoría principal en la cual tiendes a guardar o comprar más cosas, es más fácil que puedas ir hacia la parte simbólica de la misma.
Te doy un ejemplo en particular, en muchas ocasiones las personas que acumulan o tienden a adquirir bastantes cantidades de ropa en su inconsciente lo que buscan realmente es protección, qué es lo que hace la ropa con nosotros cubrirnos de alguna forma, abrigarnos.
Este simbolismo es lo que realmente está de manera inconsciente manifestándose a través de la adquisición de este tipo de objetos.
Mientras que, poniendo como ejemplo algo distinto, adquirir muchos libros. Si eres de las personas que te encanta comprar un libro a pesar de que aún no has terminado de leer el último que adquiriste, el símbolo detrás puede ser que buscas aceptación y apreciación por parte de las otras personas en base a tu conocimiento. ¿Vemos cómo se realiza esta técnica?
El momento en el que identificas el objeto y su simbolismo puedes empezar a sanar lo que éste significa y así poder desvincularte con mayor facilidad de todos estas cosas que están ocupando un espacio en tu vida que puede ser reemplazado por experiencias como tal.
Si en tu caso, acumulas pequeñas cosas que te dan o te ayudan a recordar un evento en particular, como puede ser la entrada de una película, la entrada a un concierto, un souvenir que compraste por allí en el momento de un viaje… poco a poco empiezan a ocupar espacio en tu casa y a su vez necesitas identificar qué tipo de espacio estas intentando llenar con esto.
En ocasiones es la necesidad de aferrarte al pasado, a lo que en su momento experimentaste por cierta incertidumbre al futuro, pero si te pones a pensar de una manera mucho más concreta en realidad lo que estás haciendo es evitar el presente, el momento en el que no puedes concentrarte en el aquí y en el ahora, el pasado tiene mucha más importancia y el futuro genera ansiedad.
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Lo ideal es que puedas aprender a estar en este instante
Es allí donde realmente las experiencias se pueden vivir, es en donde se construye el futuro y se aprecia, atesora y valora el pasado. Sé que suena más fácil de lo que realmente es, sin embargo, es tan solo cuestión de práctica.
Poco a poco, cuando vayas a experimentar algo que sabes que va a ser un una aventura en la que puedes tener un suvenir o en la que te de ganas de guardar algo para recordar, mejor céntrate en lo que estas viviendo, para que así puedas guardar la experiencia como tal. Mantente presente para que puedas atesorar lo que estás viviendo y no lo que esto ha significado.
Pon estas estrategias en práctica en diversos ámbitos de tu vida y pronto verás como empiezas a sentir que tienes menos ataduras, que logras vivir más centrado en el momento actual y sobre todo podrás dejar ir las cosas con un poco más de facilidad.
Cuenta conmigo para éste y otros temas de desarrollo personal, la ayuda de un profesional siempre es una excelente alternativa. Dime que opinas en la sección de los comentarios. ¡Te leo!