Azur Hotel & Spa: nada más sustentable que el amor propio

En nuestro recorrido por hoteles sustentables de Latinoamérica, visitamos Azur Hotel & Spa, situado en el casco histórico de la ciudad de Córdoba (Argentina).

Lo más interesante de este espacio turístico es que la sustentabilidad no es una sección del sitio web, ni una etiqueta de moda, sino una práctica diaria, auténtica, con interpretación propia (nada de copy-paste), transversal y tejida en cada detalle.

Amor propio: amar nuestra historia, amar nuestra cultura, amar nuestra comunidad y amar nuestro cuerpo es lo que propone Azur Hotel & Spa de manera inteligente y sensible

Poner en valor este edificio histórico del centro de la capital cordobesa fue parte del sueño de sus fundadores. Por el mismo, en diferentes usos y momentos de la historia, pasaron personajes míticos como el Che Guevara y el famoso cantante de cuarteto El Potro Rodrigo, entre otros

Destacar la cultura en un mundo despersonalizado es un acto revolucionario. Pensar global y actuar local es uno de los slogans de la sustentabilidad. Cada rincón del hotel es un homenaje a las manos que trabajan con dedicación, a los saberes transmitidos de generación en generación.

Cazuelas de cerámica negra de Rústica, horneadas con fuego ancestral; figuras talladas por Ramiro de Clauss que capturan con ternura la fauna autóctona; aceites esenciales que destilan las plantas recolectadas de forma manual en Traslasierra; muebles de la familia Coronel, fabricados monte adentro, lejos del ruido del consumo masivo, son parte del mensaje que se quiere dar:

La sustentabilidad es arraigo, es sentido de pertenencia, es el vínculo con lo artesanal, no solo por su estética, sino sobre todo por su ética. Elegir lo hecho a mano es resistir la homogeneidad global, revalorizar los procesos lentos, dignificar el trabajo y las historias detrás de cada objeto.

Por último, Azur Hotel & Spa comprende con claridad la importancia de estar bien con uno mismo como pilar fundamental de la esencia sustentable. En esta dirección, el espacio hotelero ofrece una experiencia única para relajarse: un viaje al interior indescriptible.

Agradecemos que nos hayan abierto las puertas, y nos queda resonando esta frase inspiradora: "Reconectar con lo local es un acto de justicia y de belleza."