Nota por ConexiónCOP

Cada vez se habla más del cambio climático y de la necesidad de que los países reduzcan la emisión de Gases de Efecto Invernadero (GEI) para que vivamos en sociedades más sostenibles.

Según lo que señala el Acuerdo de París, para lograr que las emisiones bajen es necesario que cada país implemente de manera correcta las llamadas "Contribuciones Nacionales Determinadas" que son los compromisos para reducir dichas emisiones, de acuerdo a sus realidades.

Para eso, además, es imprescindible que se considere que durante la COP23, es decir, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que se llevará a cabo del 7 al 18 de noviembre en Bonn (Alemania), las naciones avancen en dos temas claves para el año que viene:  el Diálogo Facilitador y el Manual de Reglas o París Rulebook.

¿A qué re refiere cada uno? 

El Diálogo Facilitador

Se estableció para que, antes de la implementación del Acuerdo de París en el 2020, se pueda hacer una evaluación de qué tan ambiciosas son las "Contribuciones Nacionales Determinadas" (NDC)  y poder realizar un balance colectivo para determinar dónde estamos en el recorrido hacia la limitar la subida de la temperatura global a 1.5°C . El Diálogo Facilitador se llevará a cabo en el 2018 como un mecanismo importante para motivar a que los países mejoren sus estrategias. 

Tania Guillén, del Climate Center Service, sostiene que actualmente las contribuciones dejan al planeta con un aumento de temperatura de entre 2.7°C y 3.5° C, pero podría mejorarse previamente al primer ciclo de implementación gracias a estos Diálogos de Facilitación.

“El diálogo facilitador es una parte del marco de transparencia establecido en el Acuerdo de París, ya que en el mismo, se hace un balance colectivo de los esfuerzos en relación a mitigación y las NDCs en general. Específicamente sobre transparencia el Artículo 13 del tratado establece un marco en el cual los países tienen que trabajar. Asimismo, la decisión de la COP21 establece una iniciativa de fortalecimiento de capacidades en materia de transparencia, la cual no es solamente para el periodo post 2020, sino también pre 2020”, indica Guillén.

De acuerdo al Artículo 14 del Acuerdo de París, los países celebrarán cada 5 años reuniones para medir el progreso de las NDC. A estas reuniones se le conoce como Global Stocktake. “Se trata de un ejercicio que debería ser comprensivo y de manera facilitada, mediante el cual las Partes pueden hablar de su progreso en materia de mitigación, adaptación, medios de implementación, y apoyo tomando en cuenta la equidad y la disponibilidad de información científica”, explica Sandra Guzmán del Grupo de Financiamiento Climático para América Latina y el Caribe (GFLAC). 

El primer Global Stocktake o Balance Global de Avances se llevará a cabo en el 2023 y de ahí se hará cada 5 años. Sin embargo, el 2018 se vuelve fundamental dado que ese año las Partes revisarán sus contribuciones para encaminarlas hacia el alcance de estabilización de emisiones y evitar el aumento de temperatura supere los 1.5°C.

El Manual o Paris Rulebook

Es el Instrumento que guiará la implementación del Acuerdo. Deberá contener guías sobre cómo informar o comunicar los esfuerzos de adaptación, mitigación, financiamiento climático, transparencia, entre otros. Asimismo orientará la evaluación de las NDC.

“El Paris Rulebook o como lo llaman ahora, el Technical Manual and Operational Guidelines -con el fin de debilitar su fuerza legal- es el conjunto de decisiones que deberá adoptar la COP24 en el 2018 con el fin de reglamentar los detalles de la implementación del Acuerdo de París”, explica Jimena Nieto, quien fue negociadora de la Asociación Independiente de América Latina y el Caribe (AILAC).

La reglamentación del Paris Rulebook es esencial para que exista un entendimiento común de las Partes sobre la implementación de cada artículo del tratado, y asegurará la ruta adecuada y el tiempo para la debida puesta en marcha del Acuerdo de París.

“De acuerdo a lo señalado en Marrakech (COP22), en donde se estableció el calendario para finalizar el Paris Rulebook, se propuso que en 2018 se deberán tener listas todas las disposiciones que permitan la plena y efectiva implementación del Acuerdo y será en 2017 el año en el que se harán las revisiones de lo avanzado durante 2016 y 2017”, indica Guzmán.

Debido a que aún no se ha definido el París Rulebook no existe una guía para medir o verificar el cumplimiento de las contribuciones. Sin embargo recalca Guillén que algunos países como Argentina han anunciado modificaciones en su NDC para hacerlas más ambiciosas.

En principio y oficialmente, los países deben empezar la implementación de sus contribuciones en el año 2020, sin embargo y dado que el Acuerdo de París entró en vigor en el 2016 – y 159 países de la Convención Marco de Naciones sobre Cambio Climático (CMNUCC) han ratificado –, se ha iniciado el proceso para tener claras las reglas y lineamientos para su implementación. Además, en el 2020 los países deberán presentar una nueva o actualizada NDC, proceso que se repetirá cada 5 años.

Por eso, el 2018 es un año clave para las negociaciones climáticas, y ya se perfila como un momento político importante para impulsar una mayor ambición de los países.

OTROS DATOS

En septiembre del 2018 se espera la aprobación por parte de los gobiernos del informe especial del Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC) al que se ha denominado “Informe Especial del IPCC sobre el Calentamiento Global de 1.5°C”.

El reporte está siendo preparado por alrededor de 90 expertos, provenientes de 39 países y se desarrolla en el contexto del fortalecimiento de la respuesta mundial a la amenaza del cambio climático, el desarrollo sostenible y los esfuerzos para erradicar la pobreza.

Puedes encontrar aquí más información.