Hace muy poco tiempo han salido publicadas algunas notas de los miembros de nuestra comunidad sobre la desaparición de Santiago Maldonado que han recibido muchos comentarios negativos y se ha abierto un debate que muy poco ha tenido de amoroso. 

Desde La Bioguía nos apena que aún sigamos discutiendo de esta manera. Lo único que queremos es que Santiago aparezca. Ponernos de un lado o de otro no nos ayuda, solo nos separa un poco más. No perdamos esa familiaridad que nos une como parte de La Bioguía, no dejemos que el odio nos gane. Ése es el viejo paradigma y nosotros venimos a construir algo nuevo. Lo que está en el centro, debajo de cada discusión, es una vida, tan valiosa como cualquiera. Santiago es un joven, una persona como tú, como yo. Y solo podremos ayudar si nos mantenemos del lado del amor

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Nuestro deseo y nuestro pedido es que Santiago aparezca, él y también todas las personas que día tras día también desaparecen en el mundo entero por distintas razones. Ojalá que se investigue todo lo necesario para conocer qué paso, ojalá que la justicia haga su trabajo para que los responsables sean identificados, ojalá que fuerzas de seguridad de cada país siempre estén del lado de la gente, ojalá que ninguna muerte sea politizada, y que los pueblos originarios tengan el lugar y los derechos que se merecen. 

Queremos un mundo donde lo que importe sea la vida, y eso no lo conseguiremos a través del enojo. ¿No crees que es hora de enfocarnos en lo que realmente vale la pena? Tratándonos de una manera más amorosa entre nosotros estaremos construyendo los lazos de solidaridad que como comunidad son vitales para ayudar a que estas situaciones se resuelvan cuanto antes.

Santiago es un jóven que tiene 28 años y que desde el 1 de agosto se encuentra desaparecido. La última vez que se lo vio estaba acompañando a la comunidad mapuche Pu Lof en Cushamen, provincia de Chubut (Argentina) en un reclamo que tenía, como trasfondo, la lucha por sus tierras. Hay quienes señalan haberlo visto cuando Gendarmería lo atrapó y golpeó; pero ellos niegan haberlo detenido.

Aún no se sabe con certeza qué fue lo que pasó.

Por eso, como la gran comunidad que somos tenemos que respetar las opiniones y expresiones de cada uno.  Si crees que has hecho comentarios desde el enojo, no te sientas mal. Todos estamos aprendiendo. Solo ten en cuenta, la próxima vez, la siguiente pregunta: Lo que piensas, lo que dices, lo que sientes, lo que haces, ¿viene del amor o del miedo?

¡Gracias por seguir construyendo esta comunidad juntos!