¿Sabías que el primer Día del Orgullo se dio en Nueva York en 1970? Sí, justamente un año después de los disturbios de Stonewall. Sin dudas, este acontecimiento marcó el inicio del movimiento en el mundo entero. Luego, años más tarde, precisamente en 1978, Gilbert Baker diseñó la bandera del arcoíris. A continuación, te contamos qué significa cada color:

Empecemos por el fucsia, el mismo pretende simbolizar el sexo; el rojo la vida; el naranja, la sanación; el amarillo, el sol; el verde representa la naturaleza; el turquesa, el arte; el índigo, la armonía y, por último, el violeta denota el espíritu.

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¡Por una sociedad que priorice los derechos de la comunidad LGTBIQ+!

¡Es momento de celebrar la diversidad sexual en todas sus dimensiones derribando los estereotipos y estigmas sociales! ¡Basta de discriminación y violencia!

Consideramos que es imprescindible instar a la sociedad toda a reflexionar en torno a la libertad de ser quien queremos ser bajo una mirada donde prevalezca el respeto, tolerancia y equidad. Y en relación a esto, es menester enfatizar que miles de seres han sufrido persecución, abusos y represiones.

Al mismo tiempo, si bien se han originado avances legales, cientos de personas de la comunidad LGBTTTI+ padecen a diario violencia por homofobia y transfobia en diversos rincones del mundo.

De hecho, si tomamos como referencia datos provenientes de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), se deja en evidencia que al menos 6 de cada 10 personas han experimentado algún tipo de discriminación, mientras que más de la mitad confesó haber sido objeto de expresiones de odio, agresiones físicas y acoso.

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Paz, empatía e inclusión colectiva

¿Es posible abordar las problemáticas ambientales desde la diversidad? ¡Claro que sí!

¡Historias como estas dejan a la luz momentos y triunfos dignos de destacar! A pesar de los obstáculos, Brigitte Baptiste se ha destacado por su gran desempeño profesional debido a que estudió biología en la Universidad Javeriana de Bogotá, luego se involucró en la educación desde otro lugar, fue profesor y ganó una beca Fullbright para hacer sus estudios de maestría en Florida.

Las palabras de Brigitte logran empatizar y erizar la piel en tal solo instantes, tuvo realmente la valentía para escuchar a su corazón y no encasillarse en los prejuicios y estándares sociales. A partir de un trabajo de introspección en una búsqueda continua de respuestas, dio cuenta que su cuerpo de varón no era el que deseaba. Así fue que a los 35 años decidió cambiar su identidad y tomar su nombre en honor a la reconocida actriz y cantante, Brigitte Bardot.

¡Los éxitos no tardaron en llegar! En 2011 fue distinguida y galardonada como la primera directora trans del emblemático Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander Von Humboldt. Como si fuera poco, aceptó la rectoría de la Universidad Ean de Colombia y allí poco a poco se convirtió en una referente no solo de la ciencia, sino también de la comunidad LGBT.

Es menester subrayar que la intelectual abordó los temas ambientales desde una perspectiva que incluye a la diversidad por sobre todas las cosas.

En exclusiva para Bioguia, Brigitte compartió sus vivencias y puntos de vistas bajo una mirada académica:

“Yo creo que lo más interesante que me está sucediendo es que veo la unión muy oportuna de todas las diversidades con la necesidad de construir soluciones innovadoras para adaptarnos a las condiciones del cambio climático. Considero que, sin ese reconocimiento de la heterogeneidad, los sistemas sociales, culturales, biológicos y tecnológicos no vamos a lograr suficientes elementos para desarrollar nuevas respuestas a los retos del presente” confesó.

Acaso las afirmaciones de la mujer trans entrelazan diversos momentos y aspectos personales donde el género, ambiente, identidades, diversidad étnica y cultural y comunidades develan luchas de personas que sienten y anhelan dejar una huella positiva en el mundo.

¡Las barreas impuestas son infinitas! De ahí en adelante estará en cada uno de nosotros tomar conciencia, respetar la vida de todos y conectar con la simpleza y amor al prójimo.

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Brigitte simboliza la historia de miles que aún no se animan a descubrirse y buscar su mejor versión

Por supuesto el medio ambiente ocupa un espacio muy importante en su vida, de hecho promueve el debate en espacios públicos en torno a la importancia de la conservación de especies, naturaleza, estudio de la ecología, entre otros. ¡Una gran referente de la ciencia!

Retomando las palabras de la académica: “Me parece muy emocionante que se esté dando esta reflexión global acerca de la identidad de las personas, del lugar que ocupan en los asuntos locales, regionales y globales relacionadas a sus perspectivas de sentido de vida. Más aún, cuando esto sucede en medio de un planeta muy transformado por los seres humanos y muy amenazado por el deterioro del funcionamiento ecológico” expresó con fervor la ecologista.

Comunicar las disidencias se convierte en una necesidad imperiosa con el fin de repensar nuevos activismos que involucren temas tales como la identidad de género, revolución política y ambiental, diversidad sexual que pongan en practica nuevas acciones que tengan como desafío comprometernos a cuestionar los discursos hegemónicos.

¡Brigitte Baptiste alza su voz con valentía y firmeza!

¿Será posible romper con lo preestablecido y analizar la diversidad desde una perspectiva crítica y ambiental donde prime el respeto?