El Día Mundial de la educación ambiental se celebra el 26 de enero de cada año. Su origen se remonta a 1975, durante el Seminario Internacional de Educación Ambiental realizado en Belgrado, antigua Yugoslavia.
En este encuentro, con la participación de expertos de más de 70 países, se establecieron las bases de la educación ambiental, recogidas en la llamada "Carta de Belgrado", representando a organismos internacionales, gobiernos, instituciones educativas y científicas. La participación incluyó representantes de Europa, América, África, Asia y Oceanía, destacando la importancia global del tema.
La Carta se centra en seis objetivos fundamentales para orientar la educación ambiental a nivel global, conocidos como los Seis Objetivos de la Educación Ambiental. Estos puntos buscan guiar los esfuerzos educativos en pro de la sostenibilidad y la conciencia ambiental:
- Conciencia: ayudar a las personas y grupos sociales a tomar conciencia de los problemas ambientales y sus impactos en su entorno.
- Conocimientos: proveer información y conocimiento básico sobre los problemas ambientales y su relación con las actividades humanas.
- Actitudes: promover valores, sentimientos de responsabilidad y actitudes positivas hacia el medio ambiente.
- Aptitudes: desarrollar habilidades para identificar y resolver problemas ambientales.
- Capacidad de evaluación: fomentar la capacidad de evaluar acciones y políticas ambientales desde una perspectiva crítica.
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¿Por qué se celebra este día?
El propósito principal del Día Mundial de la Educación Ambiental es generar conciencia sobre la importancia de la educación ambiental como herramienta clave para proteger el medio ambiente y promover el desarrollo sostenible. La celebración busca fomentar en las personas, comunidades y gobiernos un compromiso activo con el cuidado de nuestro planeta.
¿Cuáles son los propósitos de la educación ambiental?
- Crear conciencia ambiental: sensibilizar a las personas sobre los problemas ambientales y su impacto en la calidad de vida.
- Fomentar el aprendizaje: proveer conocimiento sobre los ecosistemas, recursos naturales y el impacto de las actividades humanas.
- Promover el cambio de actitudes: incentivar valores y conductas responsables hacia el medio ambiente.
- Impulsar la participación activa: promover que las comunidades participen en la solución de problemas ambientales a nivel local, regional y global.