Seamos honestos: todos perdemos el control de vez en cuando.

El problema en realidad es cuando eso pasa demasiado seguido, tanto que afecta tu vida y tus relaciones. ¿Te has sentido así alguna vez? No te preocupes, el budismo tibetano lo sabe y por eso puede darte algunas de las claves para lograr el autocontrol.

Si pones en práctica estos consejos, no dudes que las cosas empezarán a ir mucho mejor que hasta ahora.

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1. Meditar cinco minutos al día para conectar cuerpo y mente

Es sabido que los budistas dedican gran parte de su tiempo a la meditación. La razón es muy simple: meditar es una manera de limpiar la mente y concentrarse por un momento en la relación entre el cuerpo y el alma.

Esto, si se hace de forma habitual, es como un ejercicio para nuestra mente, que le permite afrontar las situaciones de estrés de forma más relajada y con un mayor autocontrol.

No es necesario que medites con la frecuencia de un monje tibetano. Con que te reserves cinco o diez minutos al día para ello, ya estarás haciendo un gran cambio.

2. Mantener el cuerpo alimentado

¿Eres de los que se ponen furiosos cuando tienen hambre? No te sientas mal, es normal. Para que tu mente funcione bien, y no cometas acciones impulsivas, una de las claves es tener la panza llena.

En realidad, se necesita tener reservas de glucosa para poder pensar con claridad. Por supuesto, siempre es mejor una alimentación sana y nutritiva.

Pero ya sabes: si esperas mejorar tu autocontrol, no lo intentes con el estómago vacío.

3. Entender que las emociones son como las olas

Toda emoción fuerte es como una ola: crece hasta llegar a su punto máximo y luego empieza a decrecer lentamente. Entender eso puede ayudarte a sobrellevar incluso las situaciones más difíciles.

La clave está en no intentar reprimir las emociones, sino saber cabalgar sobre ellas. Entender que el momento de la cresta pasará y buscar estrategias para sobrellevar ese lapso de tiempo.

4. Activar el cuerpo

Hacer ejercicio es bueno para el cuerpo, pero también para la mente y el alma. Cuando te pones en movimiento, no solo le estás haciendo un favor a tus músculos, sino que también estás trabajando para mejorar tu humor y reducir el estrés.

Además, hacer ejercicio mejora la circulación y oxigenación, entre otras cosas, del cerebro. Por eso, si estás a punto de perder el control, salir a correr o al menos a dar un paseo puede ser una forma de aclarar las ideas y llegar a una solución.

5. Descansar lo suficiente, la clave de todo

Mira, es un poco imposible intentar mantener el control de las cosas cuando te sientes completamente cansado. La fatiga genera toda una sensación de intolerancia e irritación, sumado a la sensación de que no tienes fuerzas para salir adelante con las cosas.

Necesitas dormir, en serio. Los budistas tibetanos lo saben muy bien, por eso dedican las horas necesarias al descanso. ¿O acaso no te has sentido con más capacidad de autocontrol después de una noche reparadora?

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Estos consejos no son solo una guía básica que propone el budismo tibetano para el autocontrol. También son claves para sentirte mejor y poder vivir una vida más plena .

¿Las pondrías en práctica?

Fuentes:

La mente es maravillosa