¿Dolor de garganta? Tu cuerpo tal vez quiere que hables. ¿Qué dice la biodecodificación del dolor de garganta? El conflicto emocional detrás del síntoma no solo tiene una causa física, como una infección o inflamación, sino también una raíz emocional. Este enfoque holístico sostiene que cada síntoma del cuerpo refleja un conflicto interno no resuelto.
En el caso de la garganta, su función de comunicar (hablar, expresar, decir) la conecta directamente con la autoexpresión. Por eso, cuando hay dolor, irritación o bloqueo en esta zona, la pregunta es: ¿qué estás reprimiendo? ¿Qué te estás tragando sin decir?.

Dolor de garganta: ¿qué conflicto emocional lo provoca?
La biodecodificación del dolor de garganta lo relaciona con:
- Emociones no expresadas, especialmente enojo o tristeza.
- Dificultad para decir lo que se piensa o se siente.
- Miedo al juicio o a las consecuencias de hablar claro.
- Conflictos con figuras de autoridad o con la propia identidad.
- Culpabilidad por palabras dichas o no dichas.

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Este síntoma puede aparecer en personas que constantemente se callan para no generar conflicto, que se adaptan en exceso o que sienten que no tienen permiso para expresarse libremente.
- Faringitis, afonía y amigdalitis: cada síntoma tiene su matiz
- Afonía o pérdida de voz: el cuerpo literalmente “apaga” la voz cuando no se puede expresar algo fuerte.
- Amigdalitis: inflamación que representa una lucha interna entre lo que se quiere decir y lo que se debe callar.
- Faringitis: dolor al tragar emociones reprimidas.
¿Cómo liberar el conflicto y sanar emocionalmente?
Para liberar el bloqueo energético que genera el dolor de garganta, la biodecodificación propone:
- Identificar qué se está callando por miedo o por costumbre.
- Trabajar el autopermiso para hablar con verdad y respeto.
- Sanar heridas del pasado relacionadas con la expresión (infancia, escuela, familia).
- Usar herramientas como la escritura terapéutica, la meditación guiada, afirmaciones y la terapia emocional.
Desde la mirada de la biodecodificación, el cuerpo no se enferma “porque sí”: te envía un mensaje. El dolor de garganta es una señal de que hay una verdad interior que necesita ser dicha, reconocida o liberada. Escuchar ese mensaje, atender la emoción y expresarla de forma consciente puede ser el primer paso hacia una sanación más profunda.