Aproximadamente el 11% del territorio de la provincia fue consumido por el fuego que devastó un territorio rico en ecosistemas y biodiversidad, fundamental en la preservación de la vida de las especies. Aquí cabe reflexionar en torno a como la acción humana daña y destruye sin piedad a la naturaleza, solo por fines económicos y corporativos.

“¡La vida se abre camino! El fuego se ha ido y a solo un par de días todo se llena de flores”, afirmó con alegría la coordinadora del Proyecto Iberá de Rewilding Argentina al diario El Litoral, desde la estancia Rincón del Socorro.

Según declaraciones brindadas por la fundación que dispone su labor para revertir la crisis de extinción de especies Rewilding, estiman que brotaron flores en alrededor de 500 de las 9500 hectáreas arrasadas por el fuego en el Parque Nacional.

“Esperaba ver todo negro y encontré una belleza increíble”, expresó Sofía Heinonen, directora ejecutiva de la organización, a partir de una recorrida exhaustiva en las zonas del Parque Nacional de Esteros del Iberá damnificado por los incendios en Corrientes.

HERMOSAS FLORES TRANSMITEN EL SIGNIFICADO DE LA VIDA

Mientras realizaba un recorrido por el territorio argentino, halló brotes de flores de bulbo entre las cenizas. También denominadas como lirios de lluvia, o Zephyranthes colman de belleza, colorido y alegría en medio de un panorama desolador.

De esta manera revelaba la noticia Heinonen a La Nación: “Entre esta enorme biodiversidad, así como hubo especies muy afectadas, también otras fueron beneficiadas por las condiciones de falta de competencia y de sequía con un poco de humedad tras la lluvia. Estas flores de bulbo aprovecharon estas ventanitas de oportunidad que da la naturaleza y florecieron en las zonas de lomada alta. Las partes más altas y secas del terreno están cubiertas por completo por estas flores”.

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LOS INCENDIOS NO ACABAN, PERO LOS MILAGROS DE LA NATURALEZA SE HACEN PRESENTES

Una oportunidad en medio del desastre se produce cuando la vida vuelve a nacer y da revancha ante la catástrofe ambiental. Pareciera que la Madre Tierra se renueva y a través de su enorme capacidad de reconstruirse, abre paso a un nuevo empezar.

Si bien sabemos que el daño es irreparable, las flores comienzan a brotar poco a poco. Las lluvias permitieron que los incendios se redujeran hasta un 80% y en tanto la fauna se reconstruye poco a poco.

De más está decir, que los incendios ocasionados en la región del noreste argentino han acabado con la vida de numerosas especies, afectando por mencionar algunos, vegetación acuática, bosques nativos y plantaciones de pinos y eucaliptos.

Sin embargo, hay un factor fundamental: la intervención humana será clave para colaborar con una rápida restauración en los ecosistemas. Los suelos, la flora y fauna y especies nativas son las principales víctimas, entre ellos los carpinchos, yacarés y los animales anfibios oriundos de la zona.

La naturaleza nos sigue enviando mensajes de que es posible renacer y volver a empezar, pero solo será factible si el ser humano se compromete a preservarla y respetarla como corresponde para no dañarla sin medir las consecuencias ambientales que nos castigarán a todos, indefectiblemente.

¿POR QUÉ NO ENTENDEMOS LO QUE LA NATURALEZA NOS EXPRESA?