Encontrar unapareja a través de una computadora no es algo nuevo. La primera versión de loque se podría considerar un servicio de citas como Tinder existe desde los añossesenta, cuando ingenieros de universidades estadounidenses crearon fichas paraque los interesados llenaran y después de pasarlas por una computadora seencontrara un patrón similar al de otra persona y así lograr unir a dospersonas de forma racional y lógica.  

Como se puedeesperar, eso no tuvo éxito, pero eso no implica que la gente sólo se conocía enpersona. Durante los años ochenta y principios de los noventa era muy común quela gente pusiera encabezados en los periódicos locales buscando pareja.Cualidades, expectativas, edad, estatura y más es parte del mundo de las citas desdehace décadas.  

amor periódico

¿Cómo te has conocido con tu última pareja? ¿En un bar? ¿En Tinder?

Hoy conocer a tu próxima pareja en línea es bastante común en todo el mundo, incluso hay países en los que es más común encontrar tu próxima pareja en alguna red social que en persona, pero eso no implica que debas seguir la tendencia.

Siendo parte de la generación que teme la interacción en persona si previamente no existió contacto digital, es hora de dejar el miedo y salir a encontrar el amor cara a cara.  

Festivales

festival

Algo más común de lo que crees. Muchas personas van a festivales con la intención de ver a sus bandas favoritas y terminan conociendo a su próxima pareja. Los festivales siempre producen una energía positiva en el que la gente está mucho más feliz de lo normal. Incluso si es en tu ciudad, se trata de un evento que te hace salir de lo cotidiano, por lo que al ver a una banda que te gusta y encontrar a alguien que lo disfruta tanto como tú, no es raro que muchas veces la atracción sea innegable.  

Cita a ciegas

cena

El concepto llevado a lo literal. Desde 2009 Dine in the dark (cena en la oscuridad) es un concepto que le ha dado la vuelta al mundo y hoy casi todas las grandes ciudades tienen su propia versión. Se trata de ir a una cita en la que te cubrirán los ojos con un antifaz y degustarás una deliciosa cena, muchas veces acompañada de unas cuantas copas de vino y la compartirás con otra persona. En algunos sitios incluso se hace el tradicional intercambio para que conozcas a más de una persona a la vez.  

Cursos o talleres

cocinar clase

Está claro que el principal propósito de esta actividad no debe ser conocer a alguien, sino aprender algo nuevo o reforzar una habilidad. Sin embargo, la noción de conocer a alguien de quien te puedas enamorar en un taller es bastante alta. Con una pasión similar por la actividad que harán, es más que suficiente para formar un vínculo, pero imagina si tomas clases de baile o de cocina; puede parecer un cliché, pero es un gran inicio para comenzar una amistad que se puede transformar en algo más.  

Viajar solo

hostal viajar sola

Los viajes son el último escape de una zona de confort y viajar sin nadie más te obliga a conocer a gente todo el tiempo, sobre todo si te hospedas en hostales. Gente de todo el mundo y de tu edad conviviendo día a día, viviendo nuevas aventuras y disfrutando de la vida; existe una gran posibilidad que durante un de esos viajes encuentres a alguien que tiene mucho más en común contigo de lo que pensarías a primera vista.  

En el gimnasio

Mucha gente odia que interrumpan su rutina de ejercicio hasta que se trata de “esa persona”. Muchas veces la gente no acepta cumplidos y no entra en pláticas con nadie más, pero tampoco están ausentes a la posibilidad de que alguien más les guste. Aunque este video es mucho más cómico que real, es una gran historia que resume lo que significa conocer a alguien en un gimnasio.  

El amor llega, no importa el lugar ni el momento, simplemente lo hace. Por eso es importante no buscarlo todo el tiempo. Los sitios de citas en Internet y las citas a ciegas son una gran idea, pero tampoco se trata de ir cada fin de semana o de deslizar tu dedo a la derecha hasta que hagas match con alguien, sino de sentir una verdadera conexión con alguien, y eso puede suceder en el transporte público, en una sala de espera y hasta en la fila del banco.