La geografía catalana ha padecido tres años de escasas lluvias. El resultado es grave: la tierra esta seca, la vegetación languidece, la agricultura se sume en la faena casi imposible de reverdecer.
La vida en todo el mundo se ha transformado debido a los efectos de la crisis climática. DW preguntó a gente que vive en primera persona los efectos del cambio climático.
La diplomacia brasileña critica la falta de esfuerzos para lograr un compromiso global ambicioso en aras de evitar una catástrofe climática. Por otro lado, el país se abstiene de poner fin al uso de combustibles fósiles.
El programa europeo Copernicus registró un nuevo récord mensual con una media de 14,22 grados C en la superficie terrestre, el pasado noviembre.
En la acción climática, las ciudades cumplen un rol relevante en la mitigación, ya que son responsables del 75% de las emisiones de gases de efecto invernadero, pero también en la adaptación, dado que albergan a la mayor parte de la población. En este sentido, y dada la coyuntura, ¿Cómo se ha configurado la ciudad que sirve de sede a la COP28?
Es un iceberg colosal, con casi 4.000 kilómetros cuadrados. Además, pesa casi un billón de toneladas. Se desplaza lentamente, saliendo de su estatismo, empujado por vientos y corrientes que lo dirigen.
Las consecuencias trágicas, como la perdida de casas, se suman a las amenazas posteriores como inseguridad alimentaria, enfermedades y desplazamientos.
El trágico incidente ha reabierto el debate sobre la falta de preparación y respuesta a eventos climáticos extremos, a pesar de las crecientes advertencias de los científicos.
La movilización de dinero del mundo desarrollado al mundo en desarrollo será el eje transversal en las discusiones de la próxima conferencia climática COP28, un tema que América Latina sigue de cerca.
La realidad es que los gobiernos, y sociedades, de Latinoamérica le dan escasa importancia a los asuntos del ambiente. Esto tiene varias consecuencias, las cuales se reflejan en varias estadísticas.
El cultivo del café podría complicarse por condiciones climáticas adversas, provocando menos zonas de cultivo adecuadas y una producción más baja. ¿Tendremos que prescindir de este producto en el futuro?
Después de haberse alcanzado los límites de adaptación al cambio climático, lo que quedan son las pérdidas y los daños. La vulnerabilidad —cimentada en la desigualdad— hace que los países se acerquen cada vez más a esa zona limítrofe, donde ya no hay vuelta atrás.
El déficit hídrico causó desajustes. Pero, hubo un grupo de 21 productores agropecuarios que se organizaron para sobrellevar la falta de pluviosidad.
Para hacer frente al cambio climático, la capital francesa eliminará el 40% de su asfalto y reconvertirá su arquitectura.
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