Durante este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, se tiene en cuenta a las féminas que han mostrado gran valía, pese a estar en circunstancias adversas. Tal es el caso de esta ajedrecista de Irán.

Ella se llama Sara Khadem y es una ajedrecista de nacionalidad iraní. Tomó una decisión: competir sin el velo sobre su rostro. Asevera que “el velo se ha convertido en un símbolo” y es un ejemplo de lucha femenina.

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Una joven que nació en Teherán, durante el año 1997

Su nombre completo, en idioma persa, es Sarasadat Khademalsharieh (se ha reducido a Sara Khadem en los eventos internacionales). Conocida por su participación en el Campeonato Mundial Femenino de Ajedrez 2017.

Tras las protestas sucedidas en Irán, debidas a la muerte una mujer por salir a la calle sin el velo, la joven Sara Khadem decidió no llevar más el velo. Esas manifestaciones sucedieron en 2022 y han tenido mucha repercusión.

La ajedrecista se ha convertido en una figura pública importante en su nación, un ejemplo de las lides de las mujeres por hacer respetar sus derechos. Ella asume las consecuencias de su decisión y lo hace con orgullo.

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Fuente: The Other Iran

Ella decidió competir sin velo durante un torneo en Kazajistán

Estando en ese país, supo las noticias sobre la muerte de Mahsa Amini. Entonces, cuando le tocó salir a su partida de ajedrez; lo hizo sin velo. No pudo regresar a su país, desde entonces se ha instalado en el sur de España.

Desde muchas zonas del planeta, se han manifestado apoyos a las mujeres de Irán. Mahsa Amini fue golpeada por la policía y murió por las lesiones recibidas. ¿Su delito? Salió a las calles sin llevar el velo musulmán.

Irán, desde 1979, tiene la llamada Ley Islámica. En su artículo 638, del quinto libro del Código Penal, se dice que los actos ofensivos para la moral tienen un castigo ejemplar: entre 10 días y hasta 12 meses de prisión.

Los casos más graves contra la moral, reciben una tanda de 74 latigazos. Este tipo de castigos son los que recibiría Sara apenas arribe a suelo iraní. Por lo tanto, está condenada a no regresar al país donde nació.

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Fuente: FM Impacto

Acaba de cumplir 26 años: está exiliada por ser mujer

Desde los 12 años, empezó a ganar campeonatos. Ha explicado su manera de afrontar el juego con la siguiente frase: “tienes que calcular cada movimiento pensando en todo lo que puede suceder a continuación y en algo que le dé sentido”.

Sobre su nueva vida en España, afirma sentirse cómoda. El sur de la nación española tiene altas temperaturas, como su tierra natal. Ella sigue apoyando a las mujeres iraníes y afirma que no usará más el velo.

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¿Qué opinas de la decisión de esta ajedrecista? Algo tan simple como no usar el velo, impide que regrese a su país. Pero ella no se arrepiente de haber hecho algo en favor de las mujeres.

Fuente:

ELLE