El término cuarta dimensiónaparece en distintos contextos: unos académicos como la física o las matemáticasy otros más ligeros la ciencia ficción. Hasta la fecha, ha sido soloteorías, sin embargo, los expertos se acercan cada vez más a su realidad.  De hecho, científicamente se puede probar teóricamente que la cuarta dimensión existe. Entonces, ¿por qué no la podemos ver?

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Desde el campo de la física, se hace referencia a la cuarta dimensión al hablar del tiempo, principalmente desde el planteamiento del espacio-tiempo en la Teoría de la Relatividad. En matemática, la cuarta dimensión aparece asociada a espacios euclídeos de más de tres dimensiones o, más generalmente, a espacios localmente euclídeos o 4-variedades diferenciables.

Entonces... ¿Hay una cuarta dimensión?

El problema es, en realidad, qué entendemos por tal. La cuarta dimensión,entendida como dimensión espacial adicional (no como dimensióntemporal, como en la teoría de la relatividad) apareció en las obras literariasde Oscar Wilde, Fiódor Dostoyevski, Marcel Proust, H. G. Wells y Joseph Conrad,e inspiró algunas obras plásticas de Pablo Picasso y Marcel Duchamp, influyendoen el desarrollo del cubismo.

Enla literatura, el matemático Charles L. Dodgson, que enseñó en la Universidad de Oxford, maravilló a generacionesde escolares escribiendo libros bajo elpseudónimo de Lewis Carroll, que incorporaban algunas ideas sobre la cuartadimensión. 

Para la física 

El reconocido científico Albert Einstein en su célebre teoría de la relatividad especial habló por primera vez del tiempo como una cuarta dimensión y como algo indispensable para ubicar un objeto en el espacio y en un momento determinado.

El tiempo en la teoría de la relatividad no es una dimensión espacial más, ya que fijado un punto del espacio-tiempo éste puede ser no alcanzable desde nuestra posición actual, hecho que difiere de la concepción usual de dimensión espacial.

Aunque inicialmente se interpretó el tiempo como una "dimensión" matemática necesaria para ubicar un evento u objeto, en la teoría de la relatividad general el tiempo es tratado como una dimensión geométrica más, aunque los objetos materiales no puedan seguir una trayectoria completamente arbitraria a lo largo del tiempo (como por ejemplo "dar la vuelta" y viajar al pasado). En este sentido la cuarta dimensión sí existe, pero no puede "verse".

Recientemente 

Este año, un equipo de científicos de Estados Unidos y otro Europeo publicaron en la revista científica Nature dos investigaciones complementarias sobre el llamado "efecto Hall cuántico", el cual solo ocurre en la cuarta dimensión.

"Cuando se teorizó que el efecto Hall cuántico se podía observar en el espacio tetradimensional, se consideró de interés puramente teórico porque el mundo real consiste solo en tres dimensiones espaciales", dijo Mikael C. Rechtsman, físico de la Universidad Estatal de Pensilvania, EE.UU., y autor de uno de los dos estudios.

"Era más o menos una curiosidad", agregó Rechtsman en un comunicado de la universidad.

Pero estas nuevas investigaciones demostraron que el efecto Hall cuántico, el cual está en la base de tres premios Nobel de física, puede ser emulado y estudiado.

Para analizar este efecto del espacio tetradimensional en el tridimensional los investigadores "descendieron" una dimensión y desarrollaron sus experimentos en el mundo bidimensional. Esa es justamente la mejor forma de entender este concepto tan abstracto para la mente humana. Es, en cierto punto, "la comprobación de que existe". Pero claro, no podemos verla como en las películas.