Los arrecifes de coral son estructuras rocosas que están debajo del agua formadas por esqueletos de corales y otros organismos. Los pólipos que conforman los corales segregan minerales que forman estos esqueletos externos para protegerse. Los corales se van multiplicando, conformando una colonia y sus esqueletos acumulados, más la sedimentación, crean los arrecifes, uno de los ecosistemas más diversos. Éstos son muy sensibles a los cambios en la temperatura de las aguas. Por eso están en peligro por el cambio climático, y otros factores como la pesca con explosivos o cianuro. 

Hoy en día, los corales están sufriendo una decoloración que sirve de termómetro del cambio climático. Por ejemplo, en Australia, más del 90% de la Gran Barrera muestra signos de blanqueamiento, produciendo que se descompongan y puedan morir. La Gran Barrera tiene más de 2 mil kilómetros de longitud y es el hábitat más grande del mundo con más de 400 especies de coral. Además, ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad en 1981. 

Por dos años consecutivos, sufrieron una decoloración debido a las temperaturas elevadas del agua. En 2016 murieron dos tercios de los corales y actualmente está volviendo a ocurrir.  Por eso, el arrecife de coral de Australia está en estado de emergencia. "Es como si diez ciclones la hubieran golpeado a la vez”, señala uno de los expertos. 

Alrededor del 40% de los corales se encuentran en el Océanos Pacífico; lo sigue el sureste asiático con un 32% y, por último, el Mar Índico y el Mar Rojo, con un 20%. Pero, según los científicos, cerca del 50% de los corales ya han muerto o están muriendo.

Después de la Gran Barrera, el Sistema Arrecifal Mesoamericano, de casi 1,000 kilómetros de extensión desde México hasta Honduras es el segundo más grande del mundo y el mayor de los arrecifes de coral en América.

¿Por qué se decoloran?


Cuando el agua sube de temperatura respecto de los niveles habituales, los corales expulsan las algas que los recubren; pero como ellas les brindan oxígeno, color, nutrientes y protección, se vuelven blancos al calcificarse. Si ocurre muy seguido, los corales no llegan a recuperarse y todo el arrecife peligra. 

Aunque muchos atribuyen esto al fenómeno de el Niño, la causa principal es el calentamiento global. De hecho, según datos científicos, si los gases de efecto invernadero siguen aumentando, el blanqueamiento seguirá hasta la muerte de los corales en 2050.

Recientemente, en el Amazonas, se descubrió un arrecife que ya está en peligro por las compañías petroleras que buscan explorar la región. Conoce más sobre esto aquí

El blanqueamiento de los arrecifes es una señal de alarma, ya que si no pueden recuperarse y mueren, se perderá el hábitat de la fauna marina y millones de personas que encuentran en ellos un medio de vida, perderán sus ingresos.

Puedes leer más sobre esta situación en el informe científico publicado recientemente en la revista Nature.

¡No dejemos que desaparezca uno de nuestros grandes tesoros!