Ha entrado en vigencia la Ley de Cosméticos Libres de Crueldad en el estado de California (Estados Unidos). La normativa prohíbe la venta de cosméticos y productos de higiene personal que hayan sido testeados en animales después del 1 de enero de 2020.

El ex gobernador de California, Jerry Brown, había firmado el proyecto de ley en septiembre de 2018, después de ser aprobado con unanimidad por la Asamblea del Estado de California. Se decidió que entraría en efecto a partir de 2020.

Se trata de un avance muy importante para el movimiento cruelty-free, que busca establecer una transición hacia un modo de consumo que no implique causarle daños crueles a ningún animal para hacerlo posible.

Lo que hace la ley es volver ilegal para los fabricantes importar con fines de lucro, vender u ofrecer a la venta en California cualquier cosmético desarrollado o fabricado utilizando pruebas en animales.

En pocas palabras, los minoristas de California ya no pueden vender ningún cosmético como champú, desodorante y maquillaje, que se esté probando actualmente en animales. Tampoco pueden vender cosméticos que se hayan probado en animales en cualquier momento después del 1 de enero de 2020.

Las compañías de California que violen la ley recibirán una multa de $5.000, más $1.000 adicionales por cada día que continúen violando la ley.

Sin embargo, hay una serie de excepciones a la ley, entre las que se encuentran:

- Los ingredientes que se usan ampliamente y no pueden ser reemplazados por ningún otro.

- Situaciones en las cuales la prueba en animales es la única forma de probar el ingrediente.

- Situaciones en las que la prueba en animales "se realizó para cumplir con el requisito de una autoridad reguladora extranjera".

Es probable que esa última excepción se refiera a la autoridad reguladora de China, el único país donde se requieren pruebas con animales en todos los cosméticos importados de uso no especial.

Las pruebas en animales para productos de belleza aún siguen vigentes en muchos países del mundo.

Según explica PETA en un artículo de su blog, todas las compañías que desean vender sus productos en China (donde hay un gran mercado de cosméticos) deben pagar para que sus productos sean probados en animales. Esto que significa que esas compañías no pueden ser certificadas libres de crueldad.

Según parece, las compañías cruelty-free podrían eludir la ley de California si solo realizan pruebas en animales como requisito para vender sus productos en China.

De acuerdo con las “preguntas frecuentes” de la Humane Society de Estados Unidos, los cosméticos se prueban en animales, incluidos conejos, ratones, ratas, conejillos de Indias y perros, de formas muy distitnas.

Las pruebas comunes incluyen verter productos químicos en los ojos de los animales o frotarlos en su piel. También existen las pruebas de "dosis letal", en las que los animales reciben el mismo producto químico repetidamente hasta que los mata.

Los millones de animales que se someten a pruebas médicas y cosméticas cada año mueren una vez que se completa la prueba.

Afortunadamente, hay muchas pruebas que no implican crueldad animal que son efectivas para analizar la seguridad de los cosméticos y medicamentos. La nueva ley de California muestra que podemos tener esperanza de que el futuro de los cosméticos podría algún día estar libre de crueldad en otros estados y en otros países.

Fuente:

Green Matters

Información Legislativa de California