Cada vez que vamos al mercado, consumimos un producto y luego lo desechamos, estamos formando parte de la economía. A veces este concepto nos parece muy alejado de nuestra realidad de todos los días, pero no es así. Solo que, si lo vemos a nivel más general, esto, que nos resulta tan "natural", forma parte de un sistema mucho más amplio, con el que funciona el mundo entero.

Si prestamos atención, este proceso forma una línea: los recursos se extraen para generar productos, consumirlos y desecharlos. Y para esto, se usan grandes cantidades de energía y recursos. ¿Cuál es el revés de esto? Una gran cantidad de desechos: según un informe del Banco Mundial (What a Waste: A Global Review of Solid Wa ste Management) la producción de residuos aumentará desde los 3,5 millones de toneladas diarias en 2010 a cerca de 6 millones en 2025.

Pero no solo esto. Otra de las consecuencias, además de las ambientales, que incluyen a su vez, la contaminación, la sobreexplotación de recursos, la destrucción de ecosistemas y el calentamiento global; son las sociales, porque un modelo así favorece la desigualdad y, con ella, la exclusión, el debilitamiento de las democracias, la fragmentación social, la violencia, y la pobreza. 

De acuerdo a un informe de Oxfam, solo ocho personas tienen la misma riqueza que la mitad más pobre del mundo, es decir, que más de tres millones de personas.

En un mundo donde 1 de cada 10 personas vive con menos de dos dólares diarios, ¿cómo pensar en un modelo social y económico integral? Es momento de optar por un modelo económico alternativo, no solo como opción sino como una necesidad en un contexto de escasez de recursos naturales, calentamiento global y excesiva producción de desechos.  

¿Qué es la economía circular? 

A diferencia de este modelo lineal en el cual vivimos, la economía circular se caracteriza por ser reparadora y regenerativa. ¿Qué quiere decir esto? Que todo producto, componente o recurso es parte de una cadena, de un ciclo, tal como sucede en la naturaleza. La basura, en este sentido, no existe. Por eso su sentido circular, los residuos, o bien es devueltos de forma segura a la naturaleza, o son reutilizados como materias primas de un nuevo ciclo técnico.

Desde este concepto, los materiales nuevos deben ser reutilizables y/o biodegradables; se utilizan energías renovables; la obsolescencia programada no tiene lugar porque todo puede ser reparado; y el consumo es racional. 

¿Cuáles son los principios de la economía circular?


¿Cuáles son las ventajas de la economía circular?


¿Por qué entonces todavía no se implementa a gran escala?


¿Quiénes pueden aplicarla?

Tanto las instituciones u organismos públicos, como empresas o pequeños emprendimientos.

¿Cómo puedo aplicar la economía circular en mi casa?


Por ejemplo, puedes evitar comprar productos descartables, usar bolsas de tela para ir al mercado, regular el uso de energía eléctrica en tu hogar, y no derrochar agua en tu consumo. Además, antes de tirar o de comprar, puedes buscar primero si es posible repararlo o bien regarlo a alguien a quien pueda servirle. También, puedes hacer tu aporte separando la basura, y por qué no, construyendo tus propios paneles solares para tu casa

Conoce, además, otros casos que apuestan por una economía diferente, como este banco consciente que solo financia proyectos que buscan construir un mundo mejor