Desde el año 2009, distintas comunidades de Guatemala han puesto en pie más de 100 escuelas. De una manera que, además de crear espacios para la educación, también ayuda al medio ambiente, ya que las construyen con desechos no reciclables.

Esta iniciativa les brinda la oportunidad de estudiar a miles de niños que se encuentran en zonas rurales, donde la construcción de escuelas tradicionales no es posible por la falta de recursos.

De esta forma, “Hug It Forward”, junto con los habitantes de las comunidades, se encargan de reunir los materiales necesarios, para seguidamente llevar a cabo las aulas. Es todo un trabajo en equipo en pro de la educación.

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Hablemos sobre “Hug It Forward”

“Hug It Forward” es una organización sin fines de lucro, fundada por Zach Balle, Heenal Rajani y Joshua Talmon en el 2009. Sus creadores se establecieron en Guatemala con la idea de construir escuelas en comunidades rurales con bajos recursos.

Es así como, usando botellas de plástico, entre otros materiales no reciclables, realizan las infraestructuras en un trabajo de equipo. Esto beneficia tanto a niños como jóvenes, que tienen el deseo y las ganas de aprender. Pero no solo eso, sino que también son obras ecológicas, amigables con el planeta.

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Organización y trabajo en equipo

El proyecto de “Hug It Forward” fue muy bien recibido por las comunidades de Guatemala, razón por la cual en muchas de estas, los habitantes se pusieron en marcha para construirles escuelas a sus niños.

Aunque reciben ayuda de la fundación, son las mismas comunidades quienes dirigen cada proyecto de construcción. En este sentido, lo primero que hacen es un proceso de solicitud, seguido de la recolección de al menos 6500 botellas de plástico y otros materiales.

Cuando tienen todo lo que se les pide, entonces la organización y el municipio local se encargan de pagar los gastos de albañiles, además de otros materiales indispensables para poner la obra en pie.

Es entonces cuando la comunidad, los albañiles y los voluntarios de la fundación, empiezan la construcción. Ponen cimientos, pilares y vigas de hormigón armados. Las paredes, en lugar de estar hechas con ladrillos convencionales, están elaboradas con las botellas rellenas de materiales reciclados.

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Excelente alternativa

La manera de construir estas escuelas, debido a sus materiales, es más económica que las tradicionales y promueve el reciclaje. Por lo que, sin dudas, dan un mensaje importante sobre el cuidado del medio ambiente en pro de la educación.

Por otro lado, se crea un sentido de pertenencia entre los pobladores de la comunidad, gracias a que ellos mismos se esfuerzan para lograr el objetivo: tener escuelas dignas, donde sus hijos puedan estudiar.

¿Qué te parece esta iniciativa para mejorar la educación y cuidar el ambiente? Déjanos tus comentarios.