Vacacionar siempre es nuestra salida de emergencia ante la rutina diaria, y ningún lugar parece mejor para recargar pilas que la playa, con la brisa del mar y el sol. Este destino nos brinda momentos inolvidables, y así como recibimos, también hay que dar. No se trata de agobiarnos o echar a perder nuestro viaje, sino de tomar en cuenta pequeñas acciones para ser un turista responsable. ¡Ahí van unos consejos para conseguirlo!

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1. ¡Di no al saqueo!

Es clásico que cuando visitamos la playa querramos llevar recuerdos a todo mundo, y eso incluye conchas de mar que recolectamos, artesanías hechas con productos marinos o incluso, el animalito marino completo (como corales, erizos de mar, estrellas de mar, etcétera). Parece muy inofensivo, pero es todo lo contrario.

Al apoyar este tipo de prácticas estamos induciendo en primer lugar a la extracción ilegal de organismos marinos y potencializando a su vez la pérdida de biodiversidad; se ven bonitos, sí, pero se ven mejor vivos y en su hábitat natural.

Por otro lado, el mar está en constante “regeneración” y para ello necesita material que toma de su propio medio. Cuando extraemos conchitas de mar, piedritas o arena, le dificultamos obtener nutrientes importantísimos para que esta regeneración pueda darse. Por ejemplo, el calcio es usado por los corales para construir su esqueleto o por los moluscos para formar su caparazón; cuando nos llevamos las conchitas, dejamos a estos organismos sin material para utilizar.

Estas conchas también son utilizadas por cangrejos ermitaños como refugio; los peces las usan como protección contra depredadores; para las algas, esponjas, praderas marinas y otros microorganismos son soporte; y así podríamos seguir con el listado…

Así que la próxima vez que quieras llevar regalitos, mejor apoya a los artesanos locales con la compra de alguna prenda, un mezcalito, o algún otro producto que aporte a la economía de la zona y no afecte a nuestros mares.

2. Evita el consumo de desechables durante tu estancia

En la playa nunca falta la señora de las deliciosas pescadillas, el vendedor de cocos o algún otro tipo de comerciante de alimentos. Por supuesto, hacemos nuestra compra, pero consigo trae un gran problema para el mar: la basura.

El unicel, los popotes y los plásticos en general son derivados del petróleo, por lo que tardan cientos de años en degradarse; aunado a ello, el unicel es altamente tóxico al liberar sustancias como las dioxinas que pueden causar envenenamiento y cáncer. Se estima que cada año al menos un millón de aves marinas, 100 mil mamíferos marinos y tortugas marinas mueren cuando se enredan o ingieren la contaminación plástica, y eso sin mencionar el daño que ocasiona a los arrecifes de coral.

¿Qué les sugiero hacer? No utilizarlos. Súmate a la campaña “Sin popote/bolsa/unicel está bien”. Y con esto no quiero decir que no consuman estas suculentas botanas, pero podemos llevar con nosotros un pequeño recipiente para evitar la generación de basura, o en su defecto, comer directo con las manos. Lo peor que puede pasar es darnos un chapuzón en el mar para enjuagarnos después.

Si vas a acudir al supermercado, también vale llevar consigo la clásica “bolsa de mandado” o pedir cajas de cartón para evitar las bolsas de plástico.

3. Apoya la pesca sostenible

¿Sabes qué es una veda? Es el periodo en que se prohíbe la captura de los animales para evitar la depredación de los recursos naturales, y permitir su reproducción y subsistencia. ¿Cómo nos beneficia esto? En primer lugar, para los pescadores se garantiza un incremento en sus ingresos al ofrecer al público especies de cierta talla y madurez. Para el ecosistema es sumamente importante que no se capturen organismos juveniles o pequeños, y así no se interrumpan ciclos reproductivos. Imagínate si capturaran solo camarones bebés para su consumo, después no hay reproducción de éstos. Por último, si los consumidores respetamos las vedas, se tiene certeza de que vamos a poder disfrutar mucho más tiempo estos organismos.

Seguramente ya te estás preguntando cómo puedes apoyar esta práctica, así que ahí van algunos consejos:

4. Uso de productos de cuidado personal orgánicos

La mayoría de la gente no sabe el daño que le causa a ambientes marinos con productos de belleza como bloqueadores, bronceadores, maquillaje, gel exfoliante, champú, acondicionador, pasta dental, entre otros. La mayoría de estos productos contienen ingredientes inorgánicos que liberan nitrógeno, fósforo y silicio, y una vez disueltos en el mar, provocan el crecimiento descontrolado de algas marinas, haciendo sus aguas poco productivas.

Otros productos como el champú, acondicionadores o geles, contienen diminutos fragmentos de plástico en forma de polietileno (PE) o poliestireno, que se utilizan para espesar el producto. Cuando estos polímeros se van al desagüe, llegan al océano, ya que al estar presentes en partículas diminutas, no hay forma de tratarlos, además de que su descomposición es súper lenta. Esto afecta la salud del plancton y los organismos marinos.

Un estudio hecho por la ONU, analizó un gel de ducha cotidiano en laboratorio y secomprobó que no había mucha diferencia entre la cantidad de plástico presente en el gel y en su contenedor; también se han encontrado partículas de este tipo en la sal de mesa extraída del océano. ¡Imagina los daños!

Por último, hablaremos de los químicos contenidos en los bloqueadores solares, que si bien son resistentes el agua, esa misma propiedad los hace insolubles creado una nata en el mar. El componente por excelencia de las cremas solares comunes es la oxibenzona, que es un compuesto no biodegradable que provoca lesiones letales en las larvas del ADN de los corales (llamadas “pólipos”), generando su muerte.

Así que cuando visites la playa y de preferencia, en tu vida cotidiana, evita a toda costa el uso de productos químicos que puedan dañar el mar y a los organismos que habitan en él. Ya existen tiendas mexicanas que promueven el uso de productos de belleza 100% orgánicos y biodegrabales, como Somos Tierra y los bloqueadores Coral; incluso puedes ser autodidacta y buscar cómo hacer tus propios productos naturales en la red.

5. Corre la voz

La manera más importante de cuidar nuestras playas durante nuestra estancia ahí es informarnos y transmitirlo a las personas que podamos. Estar enterados del impacto que causamos y el cómo podemos aminorarlo o combatirlo, es el paso más importante.

¡Así de fácil ponemos nuestro granito de arena para echarle una mano al mar y a sus organismos durante nuestra estancia en la playa!

¿Te sumas?

Fuentes:

https://www.gob.mx/semarnat/prensa/promueve-semarnat-campana-para-evitar-el-uso-del-popote

https://www.gob.mx/sinpopote

Derraik, José GB (2002). The pollution of the marine environment by plastic debris: a review. El Sevier (44) 842- 852.

https://www.wwf.es/nuestro_trabajo_/oceanos/pesca_sostenible_/

http://www.wwf.org.co/que_hacemos/campanas/_la_veda_nos_conviene_a_todos_2/

https://ec.europa.eu/fisheries/sites/fisheries/files/docs/body/how_do_you_choose_es.pdf

http://www.consumer.es/web/es/medio_ambiente/naturaleza/2013/04/25/216530.php

https://www.muyinteresante.es/curiosidades/preguntas-respuestas/las-cremas-solares-danan-el-oceano-831375705569

https://www.elespectador.com/noticias/medio-ambiente/cosmeticos-contaminan-el-mar-articulo-557011