¿Tenés pubertad puma?: el término viral que redefine la perimenopausia es cada vez más atravesado por mujeres que dan a conocer sus experiencias con la perimenopausia en redes sociales, dándole un giro empoderador a esta etapa con un nuevo nombre: pubertad puma.

El término, que se hizo viral en TikTok, ayuda a romper el tabú en torno a los síntomas del cambio hormonal que muchas enfrentan entre los 40 y 50 años: sofocos, ansiedad, insomnio y menstruaciones irregulares. Con humor y honestidad, este concepto invita a hablar sin vergüenza de una realidad silenciada durante décadas.

Síntomas de la perimenopausia y el difícil camino al diagnóstico

A pesar de ser una etapa natural, la perimenopausia suele pasar desapercibida por la falta de diagnóstico claro y la desinformación médica. Muchas mujeres, como Amanda, viven años de síntomas sin respuestas concretas.

Según especialistas, esta fase previa a la menopausia puede incluir niebla mental, cambios de humor y fatiga, y a menudo es confundida con depresión o estrés. Estudios recientes revelan que una de cada 30 mujeres menores de 40 ya transita esta etapa.

menopausia precoz

Tratamientos y cómo abordar la perimenopausia de forma efectiva

El tratamiento más común para los síntomas de la perimenopausia es la terapia hormonal sustitutiva (THS), que puede ajustarse a cada cuerpo con parches, pastillas o geles. También se están sumando suplementos de testosterona para mejorar la energía y la libido.

Mientras la ciencia avanza, las redes sociales están cumpliendo un rol clave: dar visibilidad, contención y redefinir esta etapa con una mirada positiva, gracias a la viralización de términos como pubertad puma.

China con brote masivo de chikungunya: más de 7.000 infectados

Conocer la “pubertad puma” —como muchas llaman a la perimenopausia en redes sociales— es clave porque nos ayuda a:

  1. Visibilizar una etapa invisibilizada: durante años, la perimenopausia fue un tema tabú o directamente ignorado. Entenderla permite nombrar lo que pasa en el cuerpo y la mente en esa transición.
  2. Reconocer los síntomas a tiempo: cambios de humor, insomnio, menstruaciones irregulares, baja energía o niebla mental pueden confundirse con estrés o ansiedad. Saber que forman parte de esta etapa permite buscar acompañamiento médico, emocional y hormonal adecuado.
  3. Reescribir el relato sobre el envejecimiento femenino: llamarla “pubertad puma” le da una vuelta empoderada, vital y positiva a un momento que históricamente fue asociado al “declive”. Hoy se resignifica como una segunda juventud, una etapa de autoconocimiento y renacimiento.