Ciudad de México, la ciudad más poblada de Latinoamérica, sufre las consecuencias de la sequía y de una larga historia de explotación de sus acuíferos. Como resultado, más de 200 barrios y colonias han vivido cortes o ausencia total de agua corriente desde principios de año. Las protestas de los afectados, tanto en la capital como en la zona metropolitana, han ido en aumento y el descontento ya salpica a las autoridades y a los aspirantes a la Jefatura de Gobierno de las próximas elecciones del 2 de junio.

México, la ciudad más poblada de Latinoamérica, se está quedando sin agua potable y el problema podría agudizarse aún más.

Se suma a esta situación, el fantasma de que la megalópolis podría llegar en cuatro meses a un Día Cero donde no quede agua para nadie, lo que ha hecho saltar las alarmas del propio presidente López Obrador. La semana pasada, el mandatario convocó un gabinete de crisis con altos funcionarios y responsables de la gestión para resolver el asunto. El éxito o el fracaso del plan amenaza con convertir el tema en un arma política. El agua no suele dar votos, pero sí que los quita cuando hay problemas en su abastecimiento.

Resulta paradójico pensar que la capital adolezca de estos problemas, cuando hace 500 años estaba construida sobre un inmenso lago. Sin embargo, con el paso de los siglos, el lago fue desecado y la mayoría de los ríos soterrados para poder seguir construyendo en la superficie. Actualmente en la capital viven más de nueve millones de personas, una cifra que asciende a 20 millones, si se cuenta con los habitantes del Área Metropolitana del Valle de México. El 70% del suministro proviene de pozos y el otro 30%, aproximadamente, es alimentado por el Sistema Cutzamala, una red de presas que abastecen a la capital desde otros Estados.

Cutzamala presenta los niveles más bajos de los últimos 26 años.

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Un reciente informe de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ponía el foco en los bajos niveles que lleva arrastrando el Cutzamala desde hace tres años por la falta de lluvias y la sequía. Las presas del sistema se encuentran al 39% de su capacidad y eso ha obligado a las autoridades a cerrar la llave cada cierto tiempo. El problema del agua no solo tiene que ver con el cambio climático, la deforestación y la ausencia de lluvias. También con la sobreexplotación del acuífero subterráneo, la inmensa cantidad de fugas y una infraestructura obsoleta que requiere una reforma urgente. “Es la crónica de una tragedia anunciada”, dice Manuel Perló, profesor e investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). “Cada segundo en Ciudad de México se pierden 12.000 litros de agua”, explica. Es decir, el equivalente a 865 piscinas olímpicas que cada día son tiradas por el desagüe sin que nadie haga nada.

Esta situación no solo es la consecuencia del cambio climático, la deforestación y la sequía por la ausencia de lluvias; sino por una larga historia de sobreexplotación de sus acuíferos, la inmensa cantidad de fugas y una infraestructura obsoleta que requiere una reforma urgente.

Mientras el agua sigue llegando a cuentagotas a algunas partes de la ciudad, las autoridades llaman a la población a evitar el desperdicio. Sacmex ha desarrollado una plataforma llamada ‘Agua en tu colonia’ que avisa a los vecinos cuándo y a qué hora habrá cortes y cuándo regresará el servicio. Algunos temen que la situación se alargue y han empezado a guardar agua en tanques o a comprarla embotellada. También se ha incrementado el mercado del agua, el robo con tomas clandestinas a modo de huachicol y la demanda de pipas y camiones cisterna ha crecido en los últimos meses un 30% en varias alcaldías.

¿Cuáles son las industrias que más agua requieren?

En México, las industrias que más agua requieren se caracterizan por su intensivo uso del recurso hídrico tanto en procesos productivos como en la generación de energía. Entre estas industrias destacan:

  • Agricultura: Es el sector que más agua consume en México, utilizándola principalmente para el riego de cultivos. A pesar de estar categorizada como una actividad primaria, su impacto en el consumo de agua la coloca al frente de los sectores que más recursos hídricos demandan.
  • Minería: La extracción de minerales implica el uso de grandes cantidades de agua para procesos como la separación del mineral, el enfriamiento de maquinaria y el control de polvo.
  • Generación de energía eléctrica: Particularmente las plantas hidroeléctricas y termoeléctricas, que requieren agua para la generación de energía, a través del enfriamiento de sistemas y como fuerza motriz para turbinas.
  • Industria de bebidas y alimentos: Este sector utiliza agua no sólo como ingrediente principal de muchos productos, sino también en la limpieza y procesamiento de alimentos y bebidas.
  • Industria química y petroquímica: El agua es fundamental en estos sectores para procesos de refrigeración, producción de vapor y como disolvente en diversas reacciones químicas.