No tires la piel de cebolla, guárdala y prepara este increíble condimento. Ya que lo habitual después de pelar una cebolla al momento de cocinar, es colocarla con el resto de la basura. Pero esto es algo que se puede utilizar para otro tipo de cosas.

Cuando se trata de condimentos, puede ser una gran aliada, aunque parezca extraño. Las posibilidades son muy amplias cuando la utilizas en la cocina, solo tienes que saber utilizarla.

¿Qué hacer con la piel de cebolla?

Hay personas que se preguntan qué hacer con la piel de cebolla, y deben saber que puede ofrecer un extra de sabor y de color a muchas preparaciones. Por eso es bueno saber cómo aprovecharla para los caldos, para el pan rallado, sopas o infusiones sin tener que gastar dinero extra.

Maneras sencillas de aprovechar la piel de cebolla

Estas son algunas maneras simples de aprovecharla en la cocina:

Sopas y caldos

Es bastante habitual usar la piel de cebolla en la cocina para hacer más intenso el sabor de los caldos y sopas. Otra alternativa es tostarla en el horno cuando prepares un asado. Consiguiendo un color mucho más intenso en su jugo y en la salsa, comparado a usarla en agua y aceite.

Aromatizante

Suele utilizarse el polvo de cebolla o el ajo granulado para ofrecer sabor a muchos de los platos con, sin invertir tanto esfuerzo. Puedes usar la piel de cebolla seca, en este caso, para dar sabor a diversos platos. Solo tienes que agarrar unas cuantas cáscaras de cebolla que ya se encuentren secas. Pásalas por la trituradora de alimentos o una batidora y obtendrás un polvo fino, que puedes usar para cualquier clase de preparación.

Remedio para enfermedades respiratorias

Usa la piel de cebolla morada con un poco de agua, limón y miel de abeja. Coloca a hervir las cáscaras en agua, cuela y añade la miel junto con el limón. Lo recomendable es tomar una taza en la noche por no más de tres y solicitar atención médica en caso de que los síntomas continúen.

Pan rallado

Si ninguna de las alternativas anteriores te convencieron, puedes incorporarla a alguna mezcla de pan rallado. Sin embargo, debes tomar en cuenta que tiene que estar bien triturada para que no sea extraña al comer. Solo tendrás que macharla en una batidora y después agregarla, siempre y cuando esté bastante seca.

Abono líquido.

Tienes que colocar dos puñados de piel de cebolla en un envase de plástico y cubrir con agua. Luego tienes que dejar reposar la preparación por 24 horas, colar y aplicar en las plantas cada 15 o 20 días. Este es un abono que se puede almacenar en el refrigerador por hasta 3 semanas. Representa incluso una manera ecológica y económica de abonar las plantas, promoviendo así su crecimiento.

Infusión

Este es un té de cáscara de cebolla que se puede usar en alguna receta como refuerzo del sistema inmunitario. Para su preparación, necesitas una cebolla de color naranja y agua hirviendo. Lavas las cáscaras y colócalas en una taza con agua caliente. Deja que repose y después retíralas del fuego antes de consumir, añade un poco de miel si lo deseas. A pesar de que en un inicio es amargo, ofrece muchos beneficios para la salud.

¿Cómo preparar un condimento con piel de cebolla?

Un simple truco para usar la piel de cebolla y obtener un sazonador muy sabroso. Lo principal que tienes que hacer es guardar todas las pieles de cebollas al momento de cocinar. Una vez hecho eso, sigue estos pasos:

También lo puedes mezclar con pimienta, sal u otras especias para darle mucho sabor a tus recetas. En caso de que desees probar algo más curioso, puedes añadir piel de zanahoria seca, calabacín o hasta cualquier cáscara de alguna fruta.

¿Cómo preparar un condimento de piel de cebolla y ajo?

Es habitual tirar las pieles de las cebollas y los ajos, pero esto se puede usar para darle sabor a las comidas. Entonces, la próxima vez que decidas cocinar con ajo y cebolla, evita desechar sus pieles, más bien, guárdalas para hacer tu propio condimento. En dado caso que hayas cocinado algo en el horno, aprovecha el calor que sobra para secar las pieles de los ajos y las cebollas que tengas.

Los ingredientes que necesitas para este condimento son:

Pasos a seguir

  1. Lava correctamente las pieles de la cebolla y los ajos.
  2. Sécalas y colócalas sobre una bandeja para horno.
  3. Hornea a unos 160 grados por 5 minutos. Vigilando y asegurándote de que se encuentren bastante crujientes antes de retirarlas del horno. Como recomendación, apaga el horno y deja la puerta cerrada hasta que estén secas.
  4. Tritúralas hasta que obtengas un polvo fino.
  5. Añade un poco de sal, pimentón, pimienta y guindilla en polvo, si quieres obtener un excelente condimento para las patatas fritas. O usa un poco la creatividad al incluir distintas hierbas mediterráneas o incluso una mezcla de masala.
  6. La cantidad va a depender de las pieles que tengas, así que deberás probar primero la mezcla para obtener conseguir el mejor resultado.

¿Cuáles son los platos en los que puedes usar la piel de cebolla?

Cuando ya has elaborado tu propio condimento casero usando la piel de cebolla, lo más seguro es que te preguntes dónde lo puedes usar para sacar su máximo provecho. Y es que las cebollas combinan a la perfección con, prácticamente, cualquier alimento. Por lo que puedes usar dicho sazonador en una gran cantidad de preparaciones. Algunas de estas pueden ser:

  1. Incluirlo en unas pechugas de pollo a la planta para ofrecerles un toque extra de sabor.
  2. Úsalo como un topping en una preparación tartar de salmón para obtener un distinto y delicioso sabor.
  3. Adorna unos canelones usando el condimento para ofrecer un toque crujiente y lleno de mucho sabor.
  4. Añádelo en una ensalada para ofrecer un toque distinto y sorprende a tus invitados.

Aparte de esto, puedes probar a añadirlo a la masa de los canelones para que puedan tener un toque diferente y crujiente. O hasta lo puedes usar para darle más sabor a las palomitas de maíz. Solo tienes que experimentar y descubrir novedosas formas de usar un sazonador casero como este en tus platos favoritos.

¿Cuáles son los beneficios de la piel cebolla?

Pese a que suele ser descartada con regularidad, lo cierto es que posee varios beneficios:

Antioxidantes: Posee elevadas cantidades de quercetina, que es un antioxidante natural de gran ayuda para proteger las células del daño ocasionado por los radicales libres y disminuir el riesgo de las enfermedades crónicas.

Mejora la salud cardíaca: Disminuye los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre, disminuyendo así el riesgo de padecer enfermedades del corazón.

Promueve la salud intestinal: La piel de la cebolla tiene una gran cantidad de fibra, ayudando a mejorar la digestión y la salud intestinal en general.

Antiinflamatoria: Debido a su contenido de quercetina, la piel de cebolla cuenta con propiedades antiinflamatorias, ayudando en el alivio del dolor y la inflamación en el cuerpo.

Beneficia la salud de la piel: Los antioxidantes que se encuentran presentes en la piel de la cebolla poseen efectos muy beneficiosos para la piel. Ayudando a disminuir la inflamación y mejorando la apariencia de las arrugas.

Al tener en cuenta todos estos beneficios, se puede decir que la piel de cebolla es un recurso que no debería ser descartado. Siempre que tengas la posibilidad, intenta usarla en las recetas para sacar provecho de sus propiedades nutritivas.

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Fuente:

Ecoinventos, Cocina y vino, La unión.