Sattva significa "impulso de evolución" y es, según la medicina ayurvédica, el nombre de la energía bondadosa y equilibradora. Por eso, Germán y Lorena eligieron este nombre para su proyecto de música y vida. Pero su historia comenzó mucho antes de que este proyecto se encaminara y tuviera nombre.

Germán estaba experimentando con círculos de sonido y terapias que utilizan la música como medio de sanación. Así fue como comenzó a sentirse atraído e inspirado por instrumentos musicales utilizados para la meditación o las terapias alternativas, y quiso tener uno para él. Sin embargo, descubrió que esos instrumentos no se fabricaban en America Latina. Eso no frenó su curiosidad y ganas de tener uno: se propuso aprender a construirlos.

Con una máquina de soldar que su padre no usaba, mucha investigación e intuición, aprendió a fabricarlos.

Mientras tanto, Lorena, recorría por medio del reiki, un camino de descubrimiento personal. En un momento de crisis, apareció para ella la posibilidad de comprar un tambor. Pero también la oportunidad de conocer a Germán, quien luego sería su compañero para emprender juntos este camino de música y sanación.

Germán ya había comenzado con el proyecto de fabricar diferentes instrumentos sagrados: el Sattva Drum, el Sattva Pan, Cuencos Tibetanos y Gongs. Pero en ese momento decidieron comenzar a hacerlo juntos.

Buscaron los modos de adaptar los procesos de fabricación a los materiales disponibles en este país, y comenzaron a expandir el proyecto y fabricar instrumentos nuevos. Así nació el proyecto Sattva Instrumentos Sagrados,  para llevar la música de sanación a todos quienes quieran beneficiarse de ella.

Los instrumentos

Los instrumentos que fabrican, por ahora, son cuatro, y cada uno tiene sus características especiales. Los cuencos tibetanos son una poderosa herramienta para terapias vibracionales, una enorme fuente de sonidos y armónicos. Al ser golpeados o frotados, producen un sonido fundamental del cual se desprenden otros sonidos más agudos, que guardan una relación armónica entre si. Esta vibración alinea la energía de quien lo usa y quien recibe su vibración, ya que puede viajar por los tejidos de su cuerpo. Los fabrican artesanalmente, con suma dedicación y cuidado, para lograr un hermoso sonido. Pero sobre todo, con un ingrediente especial: pasión.

El Gong, por su parte, es originario del sudeste asiático y ha sido utilizado a lo largo de los siglos por diversas civilizaciones para fines ceremoniales, terapéuticos y musicales. Produce un sonido fundamental del cual se desprende un universo de armónicos y sobretonos capaces de expandir hasta el infinito los sentidos y la mente de quien lo escucha. Sus profundas y largas vibraciones penetran en el cuerpo y armonizan sus delicadas frecuencias con el ritmo biológico del universo.

Se dice que no existe mente que pueda resistirse al poder del sonido de un Gong, y por eso es una poderosa herramienta para la expansión de la conciencia. Son totalmente hechos a mano y golpe de martillo con la interacción del fuego. Son frecuentemente usados en meditaciones, baños de sonido y Yoga.

El Sattva Pan es el primer handpan fabricado en Argentina. Diseñado para ser tocado con las manos, acostado sobre el regazo, e interactuar con el espíritu y las emociones de quien lo ejecuta. Es un instrumento complejo y también lo es su elaboración. Cada uno lleva semanas de trabajo a tiempo completo, se elabora con mucha paciencia y quietud interna. Es la única receta para lograr sus hermosos sonidos, producto de años de estudio e investigación. Para poder adquirir uno, se debe atravesar una larga lista de espera, que puede tardar varios años. La cual, ademas, se encuentra cerrada por el momento.

El Sattva Drum, por último, es un instrumento de acero resonante, fue creado para permitir una improvisación libre y exploración meditativa de sonidos. Es el instrumento ideal para quien desea volver a despertar a su “músico interior” y relacionarse de cerca con la música, sin tener ningún tipo de conocimiento teórico. Propone acercarse a la música con la misma naturalidad con la que abordamos nuestra lengua materna cuando éramos niños, y hacer que el aprendizaje musical sea igual de sencillo. Están afinados de tal manera que no hay notas que puedan sonar erradas, sea muy simple tocarlos y lograr una hermosa melodía con facilidad. Un instrumento para dejar que también los niños pequeños toquen, jueguen y practiquen a diario. Alentarlos a jugar, más que a practicar. Y demostrar así, que la música viene del músico, no del instrumento.

Una de las partes más especiales de esta historia es el feedback recibido por quienes se llevaron un instrumento con ellos a su rincón en el mundo: algunos les enviaban fotografías de los instrumentos en los paisajes más maravillosos. Otros, les contaban que sus pacientes con diferentes patologías habían mejorado, o que ellos mismos se sentían mejor y se habían recuperado de algún padecimiento. Muchos, incluso, les contaban que se habían animado a comenzar a incursionar en el oficio de terapeutas, y atreverse a empezar a sanar.

Estos instrumentos musicales cambiaron por completo la vida de Germán y Lorena, y ellos se proponen que, ahora, cambien para bien la vida de la mayor cantidad de personas posibles.

Para contactarte con ellos y averiguar por instrumentos escribe a:  info@sattvainstruments.com