Bullying es una palabra que se escucha con mucha frecuencia en la actualidad, y no solo se debe por lo común que puede ser este problema. También es un tema frecuente debido a las múltiples medidas que se han implementado en todo el mundo para detener dicho inconveniente. Por esto te comentamos cómo ponerle freno al acoso escolar.
Si un niño ha sido víctima del bullying es probable que tenga muchos problemas en el desempeño de sus actividades diarias, especialmente en lo que se refiere a los estudios. Debido a esto, es importante prestar atención para identificar ese comportamiento y actuar frente a una situación de violencia escolar o incluso ciber acoso.
¿Qué es el bullying o acoso escolar?
Se conoce como Bullying al acto de violencia que ocurre en las escuelas o fuera de ellas. Abarca diversas formas de violencia psicológica, verbal, social y física. Siendo mucho más graves las secuelas de la violencia psicológica, social y verbal, en comparación con las que son generadas por la violencia física. Puesto que a violencia física cuenta con un inicio y un final, pero los otros tipos de violencia tienen un alcance infinito, capaz de atravesar las fronteras del tiempo y del espacio.
El bullying es un problema social considerado como algo cotidiano, pero puede generar un gran daño al menor que ha sido afectado. Dicho acoso escolar puede presentarse de dos maneras, o es algo muy evidente o viene envuelto dentro de comentarios o bromas. Esto provoca un impacto bastante negativo en la infancia, al mismo tiempo, la violencia escolar podría ser física. Así como verbal o psicológica, y es por este motivo que los padres tienen que permanecer atentos.
Estadísticas que fueron reveladas por la UNESCO afirman que de cada 10 niños, 2 han sido víctimas del bullying o del ciber acoso. Y el 34% de los niños con edades de entre 11 y 13 años que fueron encuestados, confirmaron que por lo menos una vez en su vida han sufrido por el bullying. Por lo tanto, el acoso y el ciber acoso es una realidad que pertenece a la sociedad actual. La cultura violenta, que se promueve desde ciertos medios, lleva hasta estas situaciones.
¿Cómo inicia el acoso escolar?
Para los niños, el bullying inicia poco a poco, casi sin que otros se den cuenta, ni siquiera los mismos acosadores, ni los testigos y tampoco las víctimas. En un primer instante, aparecen bromas que podrían ser de mal gusto, de cierta forma inocente o que aparentan serlo. De igual manera, el acosador, no suele tener un plan para acosar a y torturar a alguien más. Entonces, la víctima soporta esas primeras bromas, a pesar de que no le agrade.
Esas primeras bromas, representan algo gracioso paras los acosadores, y las hacen con más frecuencia en busca de más “diversión”. Como si se tratara de niveles en un juego, el acosador incrementa las bromas, en busca de superar las anteriores y tratando de conseguir nuevas reacciones.
Llega un punto en el que nadie sabe con exactitud como inició todo, pero la situación se ha convertido en algo complicado. Las bromas que son de mal gusto, representan verdaderos actos de violencia y maltrato, convirtiendo la vida de la víctima en una completa tortura.
¿Cuáles son las raíces del acoso escolar?
Para comprender el porqué del acoso escolar, o cuáles son las raíces del mismo, es necesario dirigirse hacia los inicios de esas primeras bromas que aparentan ser inocentes. Estas son una forma de acoso, una clase de violencia y esto es cosa de todos. Cuando los adultos hacen bromas, en muchos casos de mal gusto, o se ridiculiza a alguien, se puede pensar que solo son bromas. Al igual que pensar que se tiene sentido del humor y, por lo tanto, no pasa nada.
Sin embargo, esas son las raíces que se siembran para que se desarrolle el acoso escolar. Tanto las niñas como los niños, observan como los adultos, frecuentemente, ríen ante algunas bromas. Donde la burla es utilizada por los más populares, y es allí donde los menores aprenden que a burla es un recurso de utilidad y aceptable dentro de la sociedad.
Como personas adultas, es necesario condenar la burla y actuar frente al acoso escolar antes de que suceda. Se puede usar el sentido del humor y reírse, pero evitando hacer burlas hacia los demás como un recurso para el humor.
¿Cómo identificar el acoso escolar?
A continuación explicaremos cómo identificar el acoso escolar, dividiendo las características entre víctimas y acosadores.
Características de una víctima de acoso escolar
Las víctimas son quienes más sufrimiento pasan frente a situaciones como estas. Son personas que requieren de seguridad en sí mismas, altamente manipulables y no tienen la capacidad de defenderse. Debido a esto, hay que prestar mucha atención, ya que el acoso escolar provoca que las siguientes características se presenten con mayor intensidad.
- Falta de confianza en sí mismo. Inseguros, autoestima baja y autoimagen negativa que podría llegar al desprecio.
- Aparecen lesiones físicas que el afectado puede justificar. Diciendo que ha tenido algunos accidentes o caídas.
- Rotura o pérdida de sus pertenencias personales o escolares con frecuencia.
- Cambios en el humor y en el comportamiento. Mostrando tristeza, apatía, llantos, irritabilidad, se muestran extraños y hundidos. Parecen estar distraídos y sumergidos en sus pensamientos.
- Disminuye el rendimiento escolar. Presentando faltas de atención, desmotivación y desinterés.
- Síntomas psicosomáticos.
- Cambios de apetito, pesadillas y faltas de sueño.
- No salen con amigos, no asisten a excursiones, no quieren ir al colegio y tampoco tienen amigos en los tiempos libres.
Características de un agresor en el caso de bullying
Los agresores o acosadores sufren problemas que les provoca un comportamiento que es inadecuado. La falta de disciplina y valores les hacen creer que el éxito es un sinónimo de fuerza, y que para conseguirlo tienen que humillar a otros y causar imposición en ellos. Dicho patrón de conducta les traerá diversas consecuencias negativas.
- Falta de empatía frente al sufrimiento de los demás.
- Se muestran prepotentes y dominantes o autosuficientes.
- Comportamientos agresivos de los que se sienten orgullosos.
- Hablar de manera despectiva acerca de sus compañeros, y hacen burlas sobre ellos.
- No cumplen con las normas en casa y tampoco en el colegio.
- A menudo no se hacen responsables de su conducta y, por lo tanto, no piden perdón.
- Presentan una grave falta de control en sus impulsos.
- Tienen poca tolerancia y no son nada solidarios.
- Recurren de manera excesiva a la violencia, bajo la creencia de que pueden tener éxito social al humillar a otros y desconfían en gran medida de los demás.
¿Cómo ayudar a las víctimas y acosadores del bullying?
Si se conocen las características que hacen a los menores vulnerables al acoso, es posible fomentar el desarrollo de estrategias que permitan prevenir y detener el acoso escolar. Es de gran importancia desarrollar la confianza y autoestima en sí mismo para tener la posibilidad de enfrentarse sin miedo a los posibles acosadores o abusones.
También es indispensable ofrecer estrategias que permitan enfrentarse a las habilidades sociales y para tener la capacidad de solventar los conflictos. Al ayudar a los jóvenes a desarrollar esta clase de estrategias, se estará contribuyendo a saber defenderse de los posibles abusos. Sin la necesidad de atacar al otro, pero de una manera que sea efectiva.
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Estrategias que permiten ayudar a las víctimas de bullying
- Escuchar, hacer que se sientan en libertad de contar la situación que están viviendo.
- Hacerles entender que no es su culpa.
- Ofrecerles apoyo, ayudando a que sientan que no están solos para solventarlo.
- Prestar atención a los cambios en el comportamiento.
- Trabajar en su seguridad y autoestima.
- Hacer que vea que son entendidos, procurando que no se sientan juzgados.
- Explicarles que no tienen que sentir vergüenza al pasar por una situación como esa.
Estrategias que permiten ayudar a los acosadores
- Desarrollar su empatía.
- Procurar enseñarles a socializarse y lo importante que son las normas.
- Trabajar con atención sus habilidades sociales.
- Dialogar y hacerlos de ejemplo.
- Mostrarles que el éxito no significa tener que imponerse.
- Enseñarles que la agresión representa una debilidad.
- Colocar normas claras y usar disciplina.
- No permitir que se salgan con la suya.
Consejos que permiten combatir el bullying
- Hacer lo posible por evitar la violencia, evitar la producción de la misma y enseñar alternativas hacia la misma.
- Trabajar en la prevención de las víctimas, desarrollando la confianza y autoestima.
- Educar bajo la igualdad.
- Romper con la conspiración de guardar silencio.
- Aplicar medidas de disciplina, enseñando a colocar límites.
- Educar para la solución de conflictos.
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