Por Florencia Scotti, Voz Mola de Argentina.

Según la definición de la Real Academia Española (RAE) el minimalismo es una corriente artística que solo utiliza elementos mínimos y básicos, que adhiere a una tendencia estética e intelectual que busca la expresión de lo esencial eliminando lo superfluo.

En la actualidad el minimalismo también significa tener un estilo de vida consciente y responsable con nuestro entorno, que se enfoque solo en aquellos objetos que necesitamos y nos gusten, priorizando siempre la calidad antes que la cantidad. Lo que nos llevará a cuidar los objetos que tenemos para consumir menos, permitiéndonos tomar conciencia de que se puede tener solo lo necesario para vivir.

Esta filosofía de vida tiene como objetivo poder eliminar el comportamiento consumista que causa un impacto negativo sobre el medioambiente. Además, el consumo desmedido suele ser más un motivo de estrés que de placer cuando sucede que deseamos más cosas de las que podemos pagar o tenemos más de las que podemos usar. En este sentido se podría decir que el minimalismo implica vivir de manera más sostenible.

En cuanto a la indumentaria, las personas que adhieren a esta tendencia se caracterizan por tener un armario cápsula, es decir, una selección con pocas prendas que sean básicas y versátiles.

Características de un armario minimalista

- Al ser un estilo que busca la elegancia y la sofisticación este tipo de armario estará constituido en gran parte por prendas formales y de buena calidad, que no siguen una tendencia ni una moda pasajera. Es decir que estará formado por piezas clásicas y atemporales, cuyos diseños sean simétricos, sencillos, de colores plenos y que generalmente no cuenten con estampados llamativos.

- Se compone de prendas funcionales que aportan comodidad y se adaptan al estilo de vida de cada uno.

- Los accesorios se caracterizan por su simplicidad, y se reducen al mínimo en cada look.

- Estos tipos de armarios se apegan a una paleta de colores limitada, donde generalmente predominan el negro y el blanco. Y el acento está puesto en los tonos grises, azules y marfil. Esto permite que cada una de las prendas funcione bien en varios conjuntos, ya sean formales o informales.

- Por último, tener un armario con pocas prendas te permitirá mantenerlo ordenado, y así contar con más tiempo libre y menos estrés por saber qué ponerte o cómo combinar un conjunto.

4 consejos para tener un armario minimalista

1. Hacer una revisión de la ropa que ya tienes y dividirla en tres categorías. En primera instancia las prendas indispensables que son las que te gustan, te sientan bien y te identifican. Estas serán las que se queden en el guardarropa. En segundo lugar, las prendas dudosas son aquellas que no se usan frecuentemente, pero que quizá con alguna transformación o intervención podrían convertirse en una prenda indispensable.

Por último, las prendas que se van son aquellas que no usas, que aunque te gusten, ya no te andan, te cuestan combinar, no te quedan bien o son incómodas. Estas serán las que puedes regalar a alguien que desee usarlas o venderlas en alguna tienda de segunda mano.

2. Esto te permitirá realizar una lista para las futuras compras, pudiendo definir qué es lo que realmente necesitas, que piezas van mejor con tu estilo y se complementan unas a otras para que puedas sacarle un mayor partido al resto del armario.

3. Definir una paleta de colores que te apetezca llevar, te permitirá crear una guía que te ayudará a la hora de combinar las prendas que ya tienes o definir qué prendas comprar.

4. Si necesitas incorporar una nueva prenda, hazlo en tiendas de segunda mano o en marcas que sean sostenibles. Opta por materias primas y productos que sean de industria nacional, ya que esto promueve la economía local y minimiza el impacto ambiental generado por el transporte. Antes de realizar una compra siempre piensa en qué comprar, dónde y porqué.

¿Y tú, ya estás listo para convertir tu armario en uno minimalista? ¡Cuéntanos en los comentarios!