La hora de salir a buscar trabajo es uno de los momentos más complicados por los que debemos atravesar. Necesitamos trabajar y no queremos fallar, pero la competencia siempre es mucha y las dudas también. En este contexto, el curriculum vitae se convierte en una herramienta indispensable. Él es la carta de presentación hacia los futuros empleadores, y debería estar bien cuidado.

Por supuesto, el criterio para determinar cuándo un currículum es perfecto es muy subjetivo. Pero casi sin lugar a dudas, hay algunos errores comunes que, aunque muchos los cometen, tú deberías evitar.

1. Hacer demasiado hincapié en la secundaria

A menos que acabes de terminar el colegio y estés en busca de tu primer trabajo, no deberías hacer demasiado hincapié en los datos escolares; basta con poner el grado de educación alcanzada.

Priorizar es muy importante en un currículum vitae, ya que debes rápidamente convencer a quien lo lee de que eres la mejor opción. Por eso, prioriza tus formaciones posteriores a la escuela, y tus mejores experiencias laborales.

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2. Aburrir con tu experiencia

De nuevo, el CV es un documento en el que debes venderte lo mejor posible. A veces se cree que un curriculum es mejor cuanto más experiencia se mencione. Por eso quizá comienzas tu apartado de experiencia contando que a los 10 años ayudaste a tu padre en su negocio los fines de semana.

No es necesario. Incluso más, es contraproducente. Limítate a seleccionar tus mejores experiencias laborales y hacer un pequeño detalle de tus tareas en ellas. Prioriza.

3. Tener un solo currículum vitae

Si estás buscando cualquier trabajo, lo mejor es que no tengas un solo CV. Como vas a priorizar la información, habrá detalles que para ciertos trabajos serán importantes y para otros no tanto.

Entonces, lo más inteligente que puedes hacer es tener preparados distintas hojas de vida de acuerdo al tipo de puesto al que vayas a aplicar.

4. Poner tu foto

En esto seguramente habrá controversia, pues algunas personas de recursos humanos prefieren ver la foto del postulante y otras no.

Pero la verdad es que, a menos que estés aplicando para puestos como actor/actriz o modelo, puedes ahorrarte varios problemas no poniendo tu foto.

De este modo evitas que las personas que ven tu currículum vitae tomen decisiones sesgadas. Aunque se supone que son profesionales y que leerán a fondo el CV, ya sabes lo que dicen: muchas veces la primera impresión pesa más.

5. Poner tu edad

Lamentablemente, y aunque no corresponde, muchas veces los empleadores discriminan a ciertos postulantes simplemente por la edad, sin tener ni idea de cuáles son sus capacidades.

Por eso, es justo y puede jugarte a favor no poner tu edad en el CV. Te da la oportunidad de llegar a la primera entrevista cara a cara en empresas donde quizá habrías quedado afuera de entrada no cuadraba en los criterios de búsqueda.

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6. Errores de ortografía

Tu currículum vitae tiene que ser excelente en cuanto a presentación. Debe mínimamente verse bien, respetar una misma estética. Y por nada del mundo debe tener errores.

Un error de tipografía o de tipeo puede parecerte menor, pero para quienes trabajan en áreas de recursos humanos no lo es. ¡Al contrario! Son detalles importantísimos.

¿Qué imagen de ti mismo como empleado estás dando si no eres capaz ni de cuidar la presentación de tu CV? Quienes se encargan de contratarte creerán que no te tomas demasiado en serio la búsqueda de trabajo, que eres descuidado y desprolijo.

¡Todo eso por apenas unas faltas de ortografía! Pues sí, así que mejor chequea varias veces (o pídele a alguien que lo haga por ti).

7. Un mail vergonzoso

Vamos a decir la verdad: ¡Todos hemos tenido una casilla de mail vergonzosa! cutegirl456@xxx.com puede haber sido un mail perfecto para cuando tenías 15 años, pero ahora estás buscando trabajo.

No tener una cuenta profesional puede hacerte ver como una persona inmadura.

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¿Has cometido alguno de estos errores comunes en tu currículum vitae?

Fuentes:

HuffPost