Puedes construirles una casita a los pequeños pájaros, que los anime a convivir contigo y que facilite su supervivencia. Si colocas una casa nido en tu balcón o jardín, estarás ayudando a alguno de ellos que todavía no haya construido su propio nido, o que al vez lo haya perdido en un temporal, a encontrar un refugio.
Además de que estarás acercando la naturaleza a tu hogar, será una actividad ideal para reunirse y hacer con los niños, y así aprender del fascinante mundo de las aves.
Esta sencilla casita de madera es muy fácil de armar y aquí podrás ver cómo hacerla paso a paso.
- Serrucho
- Sierra de arco
- Martillo
- Berbiquí o taladro eléctrico
- Destornillador
- Regla
- Escuadra de carpintero
- Pincel
- Lentes de protección
- 1 madera contrachapada (triplay) para exteriores de 60 cm x 122 cm y 1,3 cm de grosor
- 1 espiga de 16 cm x 0,5 cm de diámetro
- Clavos galvanizados de unos 2,5 cm de longitud
- 6 tornillos inoxidables para madera
- Pegamento resistente al agua
- Papel de lija
- Pintura de látex para exteriores
Procedimiento

1. Comienza preparando las piezas. Para esto, dibuja las medidas sobre las tablas. Para marcar bien los ángulos rectos, utiliza la escuadra de carpintero, pues es importante que las paredes y el suelo de la casita encajen perfectamente.
Se recomienda seguir las siguientes medidas indicadas:
- Para las paredes frontal y posterior dibuja dos rectángulos de 16,3 cm de ancho x 22 cm de alto. Los lados más cortos se corresponden con las partes superior e inferior.
- Haz una marca en cada lado vertical, a 13,3 cm de la parte inferior.
- Haz una marca en el punto medio de la parte superior de cada rectángulo. Estas marcas señalan la parte más alta del tejado. En cada rectángulo, traza una línea desde la marca superior a las marcas de los lados, para definir el ángulo de las aguas del tejado de la pajarera.
- Traza las dos paredes laterales de 13 x 16,3 cm.
- Recorta una pieza para el suelo de 16,3 x 15,8 cm. Distribuye cuatro agujeros en el suelo para que sirvan de drenaje. Necesitarás dos guías para sujetarlo de 16,3 cm de longitud x 1,3 m de ancho.
- Las vertientes del tejado serán una de 16,3 x 23,5 cm, y la otra de 15,2 x 23,5 cm. Haz un agujero de 0,5 cm de diámetro en cada una con el berbiquí para que sirva de ventilación.

2. Con el berbiquí y la sierra de arco, haz un agujero de 4 cm de diámetro que será la entrada de la casita.
3. Debajo de la entrada, haz otro agujero con el diámetro de la espiga.
4. Fija las guías de sujeción del suelo a la parte interior de las paredes frontal y posterior. Céntralas con las paredes, cuidando de que queden bien alineadas con las bases, y únelas con cola resistente al agua y clavos galvanizados.
5. Fija también las paredes laterales a las paredes frontal y posterior con pegamento resistente al agua y clavos galvanizados. Debes asegurarte de que las bases de las paredes estén bien alineadas.
6. Fija las vertientes del tejado a la parte superior de la casa. Para ello, asegura primero la pieza menos ancha al borde superior. La otra pieza debe solaparse en el borde del tejado.
7. Pon la pajarera cabeza abajo y fija el suelo con los tornillos para madera. Deben atravesar la base hasta las guías de sujeción situadas en el interior de la casa, en las paredes frontal y posterior. No debes poner pegamento para que puedas desmontarlo en cada cambio de estación y proceder a limpiar la casita.

8. Lija todas las superficies y bordes hasta que quede agradable al tacto, e inserta la espiga en el pequeño agujero perforado debajo de la entrada.
9. Si quieres puedes barnizarla o pintarla, pero debes tener en cuenta que a cada variedad de pájaro le atrae un color distinto. En general, son preferibles los que no contrasten demasiado con el entorno, como el verde, el gris o el canela.
10. Colócala en un lugar discreto y espera a que algún pajarito quiera tomarla como su nuevo hogar.
Notas: es importante que el interior de la casita quede natural. Además, es conveniente inspeccionarla una vez a la semana para desalojar insectos, avispas y ratones. Luego, cuando los pájaros abandonan su nido, es importante limpiarlo y dejarlo preparado para la próxima visita. Para hacer todo esto, siempre protege tus manos con guantes.