Esta niña convirtió sus juguetes en agua para los afectados del terremoto de Ecuador

Danna es una niña ecuatoriana de 10 años que cursa sexto grado en un colegio de Guayaquil. Es una niña sensible y de gran corazón. Por eso, cuando un terremoto de 7,8 grados en la escala de Ritcher afectó a su país el 16 de abril de 2016, decidió que tenía que hacer algo por ellos.

Su primera idea fue tocar timbre casa por casa en toda la ciudad para pedirle a los vecinos donaciones de agua potable, ya que sabía que muchas personas que se habían quedado sin agua corriente la estaban necesitando.

Pero su abuela no se lo permitió, porque le parecía peligroso y además no quería que su nieta molestara a sus vecinos. Sin embargo, lejos de frustrarse, Danna siguió pensando hasta que se le ocurrió una idea aun mejor.

Danna pensó que, para que sus vecinos y los demás niños del barrio sintieran la necesidad de donar agua, era buena idea ofrecerles algo a cambio. Pero, al ser una niña pequeña, ella no tenía otra cosa que sus juguetes. Así que puso una mesa en la puerta de su casa, con un cartel que informaba que cambiaba juguetes por agua que donaría a los afectados.

La iniciativa fue un gran éxito. El primer día, Danna logró recolectar 38 galones de agua con unos 40 litros de agua. El segundo día fueron 100 galones, y otros 100 llegaron el tercer día. Al final de esa primera semana pudo recolectar 400 galones de agua para enviarlos a los más necesitados y, desde que su tarea se difundió en las redes sociales, pudo conseguir muchos más. 

El terremoto dejó en Ecuador más de 700 muertos y miles de heridos. Pero, como si eso fuera poco, las lluvias están causando aun más daños allí donde ocurrió el sismo, porque los improvisados refugios para quienes se quedaron sin hogar se están inundando. Es por eso que las iniciativas como la de Danna son muy valiosas para esas personas que necesitan la ayuda de todos.

Todos podemos ayudar a los afectados por el terremoto en Ecuador. Aquí puedes enterarte de algunas de las formas en las que puedes hacerlo, pero también existen muchas iniciativas pequeñas pero efectivas, como la de la pequeña Danna.