Intenta calcular cuánto tiempo estás leyendo el feed de tus redes sociales. Te ayudo: de acuerdo a algunos estudios, el promedio de tiempo que pasamos en redes es de alrededor de dos horas diarias (cuanto más joven la persona, más tiende a subir este número).

Bueno, ahora imagina que media hora al día, decides cambiar las redes sociales por un libro, o por una revista con artículos largos e interesantes. Dicho así no parece tan difícil, ¿No? Y al finalizar el año podrías haber leído gran cantidad de historias o una considerable cantidad de información.

No se trata solo de leer para aprender, o buscar cosas muy complicadas. Los libros también pueden ser un entretenimiento, y además de enseñarte muchas cosas, el hábito de leer también tiene enormes beneficios para tu cerebro.

Estos son algunos motivos por los que deberías leer todos los días.

1. Mantiene tu cerebro en forma

El cerebro necesita estar en forma tanto como el resto del cuerpo. Ha sido demostrado que mantener nuestra mente activa es una de las principales formas de prevenir problemas como la demencia o el Alzheimer.

Leer es una de las mejores maneras de tener el cerebro activo. Puedes acompañar la lectura con juegos que requieran que uses tu cerebro, como hacer crucigramas o jugar al ajedrez.

2. Reduce el estrés

La lectura requiere de toda una actitud de tu parte: para leer tienes que estar concentrado solamente en eso. Cuando lees, desactivas la función multitarea: ese momento es solo para el libro.

Y créeme, que mucho del estrés que sientes todo el día tiene que ver con que estás haciendo mil cosas al mismo tiempo. En tu media hora de lectura diaria, mantén bien lejos el celular, y ya me cuentas cómo te sientes después.

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3. Mejora el vocabulario

Una persona promedio, aunque bien hablada, usa aproximadamente el 20% de las palabras que tiene a disposición el idioma (hablando del Español). Muchas personas están todavía por debajo de esa cifra.

La lectura ayuda notablemente a ampliar ese vocabulario, y aunque no usemos habitualmente todas las palabras que conocemos (para no alardear), tendremos recursos para expresar exactamente lo que queremos decir, y nos ahorraremos más de un malentendido.

4. Te ayuda a trabajar mejor

No solamente las personas que se dedican a las letras o a las ciencias sociales pueden verse beneficiados por la lectura. Muchas investigaciones han demostrado que la gente que lee habitualmente tiene mejores marcas en los exámenes de la Universidad, incluso en las ciencias duras, y que tienen enormes habilidades para adaptarse a todo tipo de trabajos.

Esto es así principalmente porque la lectura te ayuda a comprender consignas, a entender rápidamente cómo hay que actuar en determinada situación, y desarrolla tu capacidad de resolver problemas.

También fortalece la capacidad analítica y ayuda a comprender mejor causas y consecuencias de las cosas.

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5. Mejora la memoria

Leer requiere que todo el tiempo estés recordando cosas. En una novela, tienes que recordar a los personajes, qué ha pasado antes, cómo vienen las cosas. Sobre todo si lees un libro medianamente largo, que puede llevarte varios días.

Eso que pareciera que el cerebro hace de forma automática, en realidad se consigue gracias a un montón de procesos que suceden en nuestra cabeza. Y de nuevo, el cerebro no deja de ser un músculo: el entrenamiento que gana leyendo se mantiene luego y sirve para todo el resto de nuestras actividades.

6. Incrementa la concentración

Hoy en día, distraerse es la cosa más sencilla del mundo. Una notificación de Whatsapp, una notificación en el escritorio, un mail nuevo que tanto estábamos esperando recibir.

Es natural que suceda con la cantidad de estímulos diarios que recibimos, pero el cerebro se acostumbra a eso. Por eso, aunque no recibas ninguna notificación, no es raro que chequees el móvil cada cinco minutos mientras haces una tarea complicada. Es que tu mente ya no puede permanecer concentrada en algo.

La lectura, como dijimos antes, te obliga a concentrarte. Es la única manera de leer. Por eso, puede cambiar la forma en la que actúa tu cerebro. Prueba leyendo media hora antes de irte a trabajar, mientras desayunas. Notarás que el resto del día estarás más concentrado en tus tareas.

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Ahora, te proponemos un desafío: ¿Te animas a leer 30 minutos diarios por una semana? ¡Luego nos cuentas los resultados!

Fuentes:

Life Hack

Ilifebelt