En lugar de tratar de dividir a las personas en “tipos”, los psicólogos se centran en los rasgos de personalidad. Cada rasgo ocurre a lo largo de un espectro y son independientes entre sí, lo que da lugar a una constelación infinita de personalidad humana.

Los rasgos con la investigación más sólida que los respalda son los “Cinco Grandes” o Big Five: la apertura a la experiencia, la responsabilidad, la extraversión, la amabilidad y el neuroticismo.

Descubre cómo eres luego de revisar cada rasgo del modelo de los “cinco grandes”, y cuéntanos en los comentarios tus resultados.

¿Qué implica cada rasgo?

  • Apertura a la experiencia

Las personas con mucha apertura disfrutan de la aventura. Son curiosos y aprecian el arte, la imaginación y las cosas nuevas. Las personas con poca apertura son todo lo contrario: prefieren apegarse a sus hábitos, evitar nuevas experiencias y probablemente no sean los más aventureros.

  • Responsabilidad

Las personas responsables son organizadas y tienen un fuerte sentido del deber. Son confiables, disciplinados y enfocados en los logros. Las personas con poca responsabilidad son más espontáneas y libres. En el extremo, pueden tender al descuido.

  • Extraversión

La extraversión versus la introversión es posiblemente el rasgo de personalidad más reconocible de los Cinco Grandes. Los extrovertidos son conversadores, sociables y extraen energía de las multitudes. Tienden a ser asertivos y alegres en sus interacciones sociales.

Los introvertidos, por otro lado, necesitan mucho tiempo a solas. La introversión a menudo se confunde con la timidez, pero no son lo mismo. Los introvertidos pueden ser perfectamente encantadores en las fiestas, simplemente prefieren las actividades en solitario o en grupos pequeños.

  • Amabilidad

La amabilidad mide el grado de calidez y amabilidad de una persona. Cuanto más agradable es alguien, más probable es que sea confiado, servicial y compasivo. Las personas desagradables son frías y desconfían de los demás, y es menos probable que cooperen.

  • Neuroticismo

Las personas con alto nivel de neuroticismo se preocupan con frecuencia y caen fácilmente en la ansiedad y la depresión. Si todo va bien, las personas neuróticas tienden a encontrar cosas de las que preocuparse.

Las personas con alto nivel de neuroticismo tienden a experimentar muchas emociones negativas. Por el contrario, las personas con bajo nivel de neuroticismo tienden a ser emocionalmente estables y equilibradas.

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