Para los amantes de la decoración rústica el siguiente proyecto les va a ir como anillo al dedo. Se trata de una puerta corrediza, ¡ideal para espacios pequeños!

Si bien tiene un grado de dificultad mayor que otros proyectos, vale la pena intentar armar este diseño.

Por un lado, necesitarás un panel de madera, armado a partir de cuantos palets sean necesarios: ésta será tu puerta. Puede ir colgada en frente del marco de una puerta o de una alacena y el tamaño dependerá de eso.

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A continuación, diagrama en el piso con las maderas cómo quieres que sea la puerta. Tal vez necesites cortarlas o quitar listones. Preséntala de forma definitiva y continúa con el siguiente paso: martillar.

Clava los listones entre ellos, asegurándote que queden fijos. En este paso, puedes lijar y pintar la madera para darle un toque prolijo y personal.

Importante: El kit de guía y accesorios para hacer la puerta corredera que compres será diferente en cada caso particular. Debes recordar, a la hora de armar la puerta, que desde el tope de la puerta hasta el rail debe haber una distancia. Esta distancia va a estar marcada por el largo de las vías. Además debes recordar que la puerta no puede tocar el piso, sino que debe elevarse por tan solo unos pocos centímetros por encima del suelo.

Puedes comprar estos insumos en una tienda de suministros o ferretería. Hay diferentes estilos y diseños para este tipo de juego para puertas corredizas. Eso sí, recuerda que el largo del rail debe hacer por lo menos el doble que el marco de la puerta. 
Instala todo tal cual las indicaciones lo señalan , considerando tanto el alto como el ancho de la madera que estés usando.

Fija las ruedas de la parte superior teniendo en cuenta que la puerta quede bien aplomada y que una vez colgada no llegue a tocar el suelo.