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Cultivar hierbas en casa es una actividad muy común e incluso, gratificante, sobre todo cuando son plantas medicinales y comestibles. Sin embargo, ¿sabías que no todo va en tierra? Es decir, hay algunas que pueden cultivarse de forma diferente. Descubra cuáles son las 9 plantas que también crecen en el agua y que, además, son muy fáciles de cuidar.

Estos cultivos que crecen en agua se han vuelto muy populares en los últimos años. Sobre todo, cuando no se cuenta con espacios amplios para plantar, del mismo modo, es una buena manera darle una oportunidad al cultivo hidropónico.

¿Cuáles son las 9 hierbas que pueden crecer en el agua?

Es muy común cultivar hierbas en casa, esto se debe a que es más fácil utilizarlas y así, es posible aprovechar muchos de sus beneficios. Sobre todo, para mejorar la salud, prevenir enfermedades y ayudar a recuperar las energías perdidas. Puesto que, las propiedades de este tipo de plantas son ideales como medicina, especias para las comidas e incluso, ayudan a relajar.

No obstante, hay ocasiones en las que es muy complicado tener hierbas en el jardín, ya sea por la temporada o por el espacio disponible para su cultivo. Por esta razón, te mostraremos las 9 especies que crecen en el agua, sin dudas, una increíble opción para tenerlas siempre frescas y listas para usar:

1- Orégano

Hierbas

El orégano es una de las hierbas más utilizadas en la cocina, especialmente, por su intenso aroma y sabor. Además, tiene muchas propiedades medicinales, es antiviral, antioxidante y algunos estudios aseguran que puede ayudar a prevenir el cáncer. Su cultivo es bastante sencillo, lo único que debes hacer es cortar algunos esquejes de esta hierba y colocarlas en agua. En pocos días, sus hojas empezarán a crecer y podrás usarlas para preparar la receta que más te guste.

2- Menta

Se trata de una hierba carminativa, con un intenso aroma y propiedades antiespasmódicas, antimicrobianas, estimulantes y analgésicas. La hierba de menta está, especialmente, recomendada por sus increíbles beneficios medicinales. Del mismo modo, es una planta que contiene una gran cantidad de una sustancia conocida como mentol.

Dicha sustancia aporta una sensación de adormecimiento, puesto que tiene un efecto único de enfriamiento al entrar en contacto con la piel y la lengua. Lo mejor es que no produce variaciones en la temperatura corporal. Asimismo, la menta es una de las más populares para cultivar en agua, puesto que solo hay que cortar algunos tallos y colocarlos, directamente, en un envase con agua.

3- Albahaca

La albahaca se encuentra entre las hierbas culinarias más utilizadas, aunque también tiene increíbles propiedades medicinales. Posee efectos expectorantes, por lo que es ideal para combatir resfriados, también es antiespasmódica y es un sedante bastante suave.

Al igual que la mayoría de las que se encuentran en la lista, la albahaca puede cultivarse en agua y sus cuidados son muy sencillos. Solo hay que asegurarse de que el recipiente siempre tenga agua y mantenerlo en un lugar en el que pueda recibir luz natural. Una de las ventajas de este tipo de cultivo es que puedes tener varios tipos de albahaca en casa, incluso durante la temporada de invierno.

4- Salvia

La preferida en la aromaterapia. Además, ayuda a cuidar los dientes y combate el mal olor de las axilas. Asimismo, la salvia es ideal para aliviar los síntomas de los resfriados, calma los problemas digestivos e incluso, sirve como repelente para mosquitos y otros insectos.

Para cultivarla en agua solo necesitas cortar unos pocos esquejes durante la primavera y colocarlos en agua. La verdad es que con unas dos plantas es más que suficiente, ya que el sabor de la salvia es bastante fuerte y usar demasiado estropearía las recetas. Por otro lado, es importante colocar la salvia en un sitio aireado, esto se debe a que la humedad puede acelerar la aparición de moho en los tallos de la planta.

5- Romero

Hierbas

El romero es una planta con muchos beneficios medicinales, ayuda a prevenir muchas enfermedades. Cuenta con diferentes cualidades, es cicatrizante, antiespasmódico, astringente, antirreumático y analgésico. Además, es ideal para relajar los músculos, humectar la piel y aliviar problemas estomacales.

Su uso en la cocina es muy común, sobre todo en recetas que necesitan un toque aromático. La planta de romero puede tardar mucho en crecer, sin embargo, al cultivarla en agua se puede conseguir un crecimiento más rápido. Especialmente, si se cortan los brotes durante la primavera, de todas las hierbas, el romero es ideal para usarla como planta de interior. Aunque es importante dejarla cerca de un lugar en el que pueda recibir la luz solar.

6- Tomillo

Para cultivar el tomillo en agua, lo recomendable es tomar los esquejes nuevos, puesto que así, crecerán más rápido. Los esquejes viejos suelen tornarse de color marrón y son muy duros, mientras que los nuevos, tienen un tono muy verdoso y un aroma increíble. Se aconseja tomar los esquejes justo a la mitad de la primavera o cuando inicie el verano, preferiblemente, antes de su fase de florecimiento.

Los esquejes de tomillo deben colocarse en un recipiente con agua, este proceso debe hacerse inmediatamente, ya que suelen secarse a una rapidez asombrosa. De hecho, es importante rociar la punta de los esquejes con un poco de agua para que se mantengan bien hidratados.

7- Estevia

Considera uno de los mejores sustitutos del azúcar, las hojas de estevia son utilizadas como endulzante natural. Lo mejor es que no provoca ningún tipo de modificación en los niveles de azúcar en la sangre ni en las células del cuerpo. Suele ser una de las alternativas recomendadas por especialistas en nutrición para las personas que desean hacer dieta.

Asimismo, la estevia tiene propiedades que sirven para combatir varios tipos de infecciones, la diabetes y los problemas en el páncreas. Además, es ideal para reducir los niveles de hipoglucemia y permite mantener la hipertensión bajo control. Si deseas cultivarla en agua, coloca un poco cantidad de esquejes de estevia en un recipiente y llénalo con agua, mientas más luz tenga mejor.

8- Estragón

Hoy en día, se conocen distintas variedades de estragón, sin embargo, el francés es uno de los más utilizados en la cocina. Para cultivarlo en agua, lo recomendable es tomar varios esquejes de la planta durante la temporada de primavera, ya que así, crecerán más rápido. Una vez tengas los esquejes, introdúcelos en un vaso o recipiente, preferiblemente de vidrio y llénalo con agua. Como recomendación, es necesario colocar el recipiente con los esquejes en un sitio cálido que tenga luz natural.

9- Hierbabuena

La hierbabuena es un tipo de menta muy utilizada en la preparación de muchas recetas, incluyendo postres y bebidas. Fresca es perfecta para preparar bebidas frías, sobre todo, durante la temporada de verano. Su cultivo en agua es muy simple y no representa ningún tipo de complicación, todo lo contrario. Solo necesitas un envase con agua y un lugar cálido en el que la planta pueda recibir la cantidad suficiente de luz para que pueda crecer sin problemas.

¿Qué necesitas para cultivar hierbas en agua?

Hierbas

Tal como has podido notar, cultivar hierba en agua no es una tarea difícil, de hecho, es más simple de lo que parece. Solo necesitas tener en cuenta dos factores que son: el recipiente y por supuesto, el agua.

Recipientes

Lo recomendable cuando se trata de cultivarlas, es usar contenedores de vidrio. Ya sean botellas o vasos que sean largos para darle suficiente espacio para que puedan enraizar sin problemas. Ten presente que algunas raíces no toleran la luz directa del sol, en este caso, lo mejor es optar por botellas o recipientes de color ámbar, puesto que evitan que la luz atraviese la botella.

Agua

Lo ideal en este caso es usar agua pura, pero jamás que contenga cloro, ya que dicho químico puede dañar seriamente, las hierbas plantadas. Una gran opción es llenar una jarra con agua del grifo y dejarla reposar durante la noche, esto con el fin de que el cloro se disipe. Al día siguiente puedes usar el agua para verterla en el contenedor que usarás para cultivar la hierba de tu preferencia.

También puedes utilizar el agua de lluvia, de hecho, es una increíble alternativa, puesto que se trata de agua natural. Lo que permitirá que las hierbas puedan crecer de forma rápida y saludable, si tienes un manantial cerca, también puedes usar su agua, ya que sus minerales contribuyen con el buen desarrollo de las plantas.

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Fuentes: Trucos de jardinería, Infoagro, Cgculturagourmet.