La mayoría de los alimentos que se encuentran en los supermercados recorren grandes distancias para llegar allí, lo que implica un gran costo ambiental y económico. En los últimos años ha surgido el concepto de kilómetro 0, que propone consumir la mayor cantidad posible de productos cuya materia prima proceda de un radio menor a 100 kilómetros de distancia respecto al consumidor.

Es decir, que los alimentos recorran la menor distancia posible desde su lugar de producción hasta la mesa donde son consumidos. El término fue acuñado por Carlo Petrini, quien fundó en 1986 el movimiento Slow Food, que defiende los productos y la cocina propios de cada comunidad y los métodos de elaboración artesanales.

Elegir alimentos kilómetro 0 impacta positivamente en muchos aspectos:

Respeta el ambiente

En la mayoría de los países, los camiones recorren grandes distancias transportando los alimentos de un lugar hacia otro. Al reducir estas distancias, se reduce la emisión de gases de efecto invernadero implicados en el cambio climático y, por lo tanto, se reduce la huella de carbono. También permite limitar el uso de energía y evitar el agotamiento de recursos finitos, lo que lo convierte en un concepto esencial para una alimentación sostenible.

Promueve una alimentación más saludable

El kilómetro 0 implica consumir los alimentos en su mejor momento, es decir, consumir productos frescos y de estación. Esto implica que los alimentos son, en su gran mayoría, libres de conservantes, sin agrotóxicos y orgánicos, lo que impacta muy positivamente en la salud de la población.

canasto de frutas y verduras para una alimentacion saludable

Favorece la economía local

Al consumir alimentos kilómetro 0 se apoya a los pequeños y medianos productores que viven y trabajan cerca del lugar donde uno vive, lo que tiene un impacto positivo en el desarrollo económico de cada ciudad o barrio.

Garantiza precios adecuados o más económicos

El kilómetro 0 tiene beneficios tanto para el productor como para el consumidor. Para este, porque no existen intermediarios de comercialización, transporte y distribución de los alimentos. Para el productor, porque recibe un pago justo por su trabajo y le facilita el acceso al canal comercial que de otra forma no tendría debido a su corta productividad, ya que no posee grandes extensiones de cultivo.

Acceder a la información real sobre lo que se consume

Brinda la posibilidad de acceder a información real ya que permite conocer a los productores de los alimentos que se consumen. Al conocerlos, se puede saber en profundidad el origen de los productos, los métodos de producción, la calidad de su alimentación y la seguridad alimentaria, lo que genera la confianza para elegirlos. La mejor manera de encontrar alimentos kilómetro 0 es en los mercados locales.

¿QUÉ TE PARECE ESTE CONCEPTO?

Fuentes:

Sabe la Tierra

Hablemos del Campo