* Por Martín Vainstein

Según cifras que recopila y difunde el Museo de Ciencias Naturales Antonio Scasso de San Nicolás, se consumieron más de 95 mil hectáreas de humedales en lo que va del año. En dos años y medio, el total asciende a 853 mil hectáreas, casi 42 veces la superficie de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

No son incendios casuales, ni esporádicos, ni nuevos. María Fernández Benetti, integrante de la Asociación por la Justicia Ambiental (AJAM) explica que existe una pamperización de los humedales producto del desplazamiento de la actividad ganadera hacia zonas bajas.

¿Por qué se produjo esto? Por el desarrollo y expansión del modelo sojero y agrotóxico que no alimenta y envenena a la población.

“Es así como desde 2007 aumentó exponencialmente la cantidad de cabezas de ganado en la zona y, por ende, el abuso del uso del fuego”, dice Benetti y señala que si bien en aquel momento el fuego fue una herramienta de manejo del pajonal hoy es una herramienta de aniquilación.

Para el abogado ambientalista Enrique Viale los incendios son 100% intencionales. “Detrás de esto está fundamentalmente el agronegocio y, en parte, la especulación inmobiliaria. Las quemas son para renovar las pasturas para la ganadería”, dice en una entrevista para el medio televisivo América TV.

El fuego no sólo impacta en los humedales: según un relevamiento de la Universidad Nacional de Rosario el aire llegó a estar 17 veces más contaminado de lo permitido por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esto redunda en mayores dificultades respiratorias, en cuadros más graves de Covid y más riesgos en los embarazos.

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¿Quiénes están detrás de los incendios?

Viale señala a la familia Baggio como una de las principales responsables del ecocidio.

Rufino Pablo Baggio, uno de los hijos del fundador de la empresa de jugos es dueño de 30 mil hectáreas sobre las islas del Delta que según los registros, suelen incendiarse regularmente. En el 2020, el Juzgado Federal N°2 de Paraná, en Entre Ríos, le inició una causa por estos mismos incendios.

El ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, fue parte de esa denuncia. “Soy querellante de esas causas, me presenté en la justicia en aquel momento y la verdad que en estos dos años no avanzaron”, afirma en diálogo con el periodista Fontevecchia.

A su vez, el Ministro denunció que hay propietarios, arrendatarios y hasta funcionarios involucrados en las quemas del Delta del Paraná. “Está el ex Ministro de Economía Roque Fernández, el caso de José Antonio Aranda, el intendente de San Nicolás y familiares del intendente de Victoria”, agrega.

Mientras la justicia se demora y el Congreso de la Nación no avanza en el tratamiento de la tan esperada Ley de Humedales, nuestras tierras y nuestra biodiversidad arden cada día más.

¿Le ganaremos la pulseada a los lobbies? ¿O seguirán quemando nuestro presente y futuro con total impunidad?

* Martín Vainstein es politólogo y co-coordinador nacional de Climate Save Movement.