Viral: los scones de calabaza que transformarán tus desayunos son únicos. Cada vez más personas se animan a preparar en casa recetas fáciles y originales, sin técnicas complicadas ni ingredientes difíciles de conseguir. En ese camino, los scones de calabaza se destacan como una alternativa deliciosa para variar los clásicos panificados del desayuno o la merienda.

¿Por qué sumar calabaza a tus scones?

Este vegetal tan presente en la cocina argentina no solo sirve para sopas, guisos o purés: también puede darle un giro único a la pastelería casera. La calabaza aporta humedad, un dulzor natural y un aroma suave que combina perfecto con la textura esponjosa de los scones.

Ingredientes básicos y fáciles de conseguir

La lista es corta y accesible:

👉 Consejo: asegurate de que el puré esté bien frío y escurrido para que la masa conserve volumen y los scones no se bajen en el horno.

Crepés de zucchini sin harina: la receta saludable

Una receta simple, económica y original que le dará un giro delicioso a tus meriendas y desayunos caseros.

Paso a paso de la receta

  1. Cocinar la calabaza al vapor u horno, hacer un puré y dejar enfriar.
  2. Mezclar la harina con sal, azúcar y polvo de hornear. Agregar la manteca fría en cubitos y deshacer con los dedos hasta obtener textura arenosa.
  3. Batir el huevo con el puré de calabaza y la esencia elegida.
  4. Integrar húmedos y secos, sin amasar demasiado.
  5. Estirar la masa de 2 cm de grosor, cortar en círculos o triángulos.
  6. Hornear a 180 °C durante 15-20 minutos hasta dorar.

Cómo lograr la textura perfecta

La clave está en no sobremezclar la masa: cuanto menos la trabajes, más tiernos quedarán los scones. Si te gustan más aireados, podés sumar un poco más de polvo de hornear.

Ideas para acompañarlos

Los scones de calabaza caseros son versátiles: podés servirlos con mermeladas, miel o queso crema, pero también combinan con fiambres suaves para quienes prefieren algo salado. Su sabor delicado y color dorado los hacen perfectos para cualquier mesa.

Conservación y tips extra

Podés guardarlos en un frasco hermético por dos o tres días. Si los querés disfrutar tibios, bastará con darles un golpe de horno antes de servirlos. También podés congelarlos y recalentarlos cuando lo necesites.

Una receta simple que sorprende

En menos de 30 minutos, obtenés un panificado casero distinto, ideal para quienes buscan variar lo tradicional sin complicarse. Los scones de calabaza son fáciles, económicos y aportan un toque de color y suavidad que hará que tu merienda sea inolvidable.