Muchas veces, se formula la siguiente pregunta: ¿Quién es dueño de los océanos? Indagando al respecto, la respuesta puede ser contradictoria: los océanos no son de nadie, pero hay aguas que son de ciertos países.
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Los océanos abarcan dos terceras partes del planeta
Son enormes, pero un 64% de esta masa de agua no es ningún país en específico. Esto es lo que se conoce como “altamar” o “aguas internacionales”. Un espacio que queda, a veces, sin ley o que tiene un limbo en su aspecto legal.
En el siglo XVII, se plantea que todas las aguas de los mares sean libres, sin propiedad ni jurisdicción. Pero, esta situación cambia un siglo y medio después, ya que muchas naciones consideran que necesitan un espacio de cuidado en sus costas.
¿Qué significa lo anterior? Pues; cada país tiene derecho a un espacio marino que, en la actualidad, es de 12 millas náuticas (equivalente a 22,2 kilómetros) desde su borde costero. Una medida de protección para cada nación.
Aguas territoriales y aguas internacionales
Ese espacio de 12 millas náuticas es lo que se llama “aguas territoriales”. Es espacio marino que pertenece a un país. Por ende, en esas aguas territoriales las leyes que se aplican son las de la nación a las cuales pertenecen.
Más allá de las 12 millas náuticas aparecen las “aguas internacionales”. Son espacios oceánicos que no pertenecen a ningún país, por lo que en ciertos momentos se han convertido en un territorio sin ley, lo cual ha desencadenado inconvenientes.
En el año 1958, durante la primera Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, se hicieron las primeras codificaciones sobre la regulación de altamar. Esto desembocó en el tratado amplio de derecho marítimo de 1982.
El cambio de 1982 es importante. Antes, se consideraba que los océanos “no eran de nadie”. Luego, se cambió el discurso y se dice que los “océanos son de todos”; ya que son un patrimonio en comín de la humanidad.
Con este nuevo criterio, todos deben velar por el cuidado de altamar. Si algo indebido sucede en estas aguas internacionales, es asunto de todas las naciones. Para esto último, se necesita un acuerdo internacional sobre altamar.
2023: el Tratado de Altamar de la ONU
En 2023, tras años de negociaciones, surge un nuevo tratado para las aguas internacionales. Lo interesante de este nuevo acuerdo es que abarca la protección de estos espacios, algo de indudable importancia ante la crisis climática.
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¿Qué implica el nuevo tratado de altamar de 2023? Conlleva el compromiso de los países para evitar la contaminación y deterioro de las aguas internacionales, algo que sin duda será positivo para todos.
Fuente: cnnespanol.cnn.com.