Ya es noticia que Nueva Zelanda anunció un amplio plan de descarbonización. Esta medida se encuentra entre las iniciativas más importantes contra el cambio climático, siendo aplaudida por sectores ambientalistas.

También te puede interesar: Citas románticas: Cuáles son los nuevos hábitos de seducción, según la ciencia

El plan fue anunciado el lunes 16 de mayo

La primera ministra, Jacinda Ardern, hizo pública la iniciativa gubernamental. Es un trabajo que abarca una heterogeneidad de sectores: industrias, transporte, agricultura y electricidad, por lo que es muy versátil.

En Nueva Zelanda se apunta a una transición hacia bajas, o nulas, emisiones de CO2. Para lograrlo, el país invertirá 2.900 millones de dólares neozelandeses (1.800 millones de dólares de USA), lo cual es un monto importante.

Se trata de un Fondo Gubernamental para la Descarbonización de la Industria. Una de las facetas más interesantes son los préstamos a familias de bajos ingresos; para que puedan reemplazar equipos contaminantes.

La meta: emisiones neutras para el año 2050

Se espera que las familias puedan usar vehículos eléctricos, con nuevos sistemas de movimiento como vías peatonales dos ciclovías. Además, se ha pautado que, para el año 2035, el 30% del sistema automotor cambie.

La intención es virar hacia los autos de eléctricos. A su vez, que el sector agrícola y forestal implementen la reducción de emisiones contaminantes. También, la implementación de biomasa en lugar del uso de carbón.

Las estrategias de implementar apuntan un cambio gradual en el uso de tecnología. También, que no sea una cuestión específica de las grandes industrias. El motivo es corregir errores de iniciativas similares con anterioridad.

Muchas veces, se ha creído que estos cambios únicamente atañen al sector industrial. En realidad, debe ser un cambio amplio por parte de la población. Desde los lugares, pasando por todas las actividades, incluyendo el transporte.

Es así como se colocó uno de los ejemplos más interesantes contra el cambio climático. En buena medida, se espera que el plan neozelandés se convierta en ejemplo para otras naciones. Algo que resultaría sumamente positivo.

Muchas naciones luchan contra el cambio climático

Existe una meta: que la temperatura global no se incremente en más de 1,5 grados respecto al período preindustrial. Es una preocupación generalizada, ya que se sabe que habría consecuencias muy negativas para todo.

Ese aumento de la temperatura implicaría cambios en las cosechas. También, gran cantidad de hábitats se verían afectados. Se añade que las estaciones, las corrientes marinas y los ecosistemas tendrían cambios demasiado radicales.

También te puede interesar: Descubren posible función de las estatuas más enigmáticas de la Isla de Pascua

¿Tendrá éxito esta iniciativa neozelandesa? Probablemente así será, ya que el país ha demostrado tener disciplina en su coordinación gubernamental. Ojalá que en otras naciones se repliquen actividades similares.

Fuente:

INFOBAE