El incremento de las temperaturas a causa del cambio climático ha llevado al derretimiento de los glaciares. La consecuencia de esto es el incremento del nivel del mar. Un estudio determinó que desde 1900 hasta 2016, el nivel promedio a nivel mundial se ha incrementado entre 16 y 21 centímetros. Los expertos estiman que, si esta tendencia continúa, en 2050 estarían en peligro hasta 300 millones de personas que viven en ciudades y comunidades costeras.

En 2013, National Geographic estimó que los niveles del mar subirían 65 metros si se derritiera todo el hielo terrestre del planeta. Esto reformaría dramáticamente los continentes y ahogaría a muchas de las principales ciudades del mundo, como Miami, Buenos Aires y El Cairo. El medio Business Insider hizo un mapa animado que muestra cómo sería el mundo si este futuro se hiciera realidad.

La fusión cada vez más rápida de las capas de hielo y los glaciares está elevando el nivel del mar y cambiando las costas del mundo. Miami, junto con toda la costa este de Estados Unidos, estaría bajo el agua si se derritiera todo el hielo del mundo. Europa, por su parte, tendría que despedirse de Londres, Venecia y los Países Bajos.

El agua se tragaría todo el país de Bangladesh, que actualmente alberga a más de 160 millones de personas, así como Calcuta en India, con una población de 4,6 millones. El desbordamiento del delta del Mekong rodearía las montañas de Cardamomo de Camboya como una isla. Australia perdería gran parte de la franja costera donde vive aproximadamente el 80% de sus residentes. Shanghai sería inundada por el Mar Oriental de China.

En América del Sur, la cuenca del Amazonas y la cuenca del río Paraguay desaparecerían, destruyendo Buenos Aires y la mayor parte de Paraguay. África perdería menos tierra que otros continentes. Sin embargo, olas de calor insufribles harían inhabitable gran parte de la región.

En la Tierra hay más de 20 millones de kilómetros cúbicos de hielo. Tomaría más de 5 000 años derretirlo todo. Pero dentro de la próxima generación, algunas ciudades podrían dejar de existir si los países no reducen sustancialmente las emisiones de carbono.

Las consecuencias del cambio climático también incluyen hambrunas masivas, sequías, inundaciones severas, plagas, océanos envenenados y olas de calor sin precedentes. Un artículo de la revista New York señala que los investigadores predicen que este tipo de desastres harán que la guerra y el colapso económico permanente sean más probables.

Fuente:

Business Insider