Durante décadas se estimuló el debate. Decir lo que piensas, expresar lo que sientes, querer cambiar la forma de ver el mundo a los demás era una forma de expandir lo que sabíamos sobre el mundo, pero los últimos años eso ha cambiado gracias a las redes sociales.

Ahora la opinión se guarda públicamente, ya nadie dice lo que piensa porque expresar un punto de vista en Internet, si no es exactamente el mismo que el de la mayoría, te puede hacer víctima del abuso de gente que se esconde tras sus pantallas. 

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Esto se acentúa mucho más en época de elecciones. Cada persona, sin importar su nivel educativo o posición socioeconómica tiene derecho a expresar lo que siente y lo que espera que suceda con su país, pero aquí la intolerancia de la gente se exhibe.

Y eso es sólo con los comentarios a los que la gente tiene derecho, muchas opiniones personales, acerca de temas totalmente subjetivos son parte del día a día de las redes sociales, donde miles de trolls esperan para reclamar la razón y hacer ver a los demás como ignorantes que no saben de lo que hablan.

Esa cultura digital es tóxica para el engrandecimiento humano y necesita terminar. Debemos volver a decir lo que queremos sin miedo a que nos avergüencen y eso lo lograremos expresándonos mejor en el campo de batalla. 

Gramática y ortografía

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Si Internet fuera un lugar en el que se siguen las reglas de la vida real el mundo sería distinto, pero aquí no importa si tienes la razón incuestionablemente, una falta de ortografía es todo lo que un troll necesita para cambiar el argumento de sus comentarios y atacarte por "no saber escribir". No hay que darle armas para que te destruya, por lo que no importa qué tanto te altere el mensaje que te escriban, no lo redactes sin pensar, porque esa escritura bajo presión es lo que ellos quieren que hagas para que cometas tu primer error. 

Evita las metáforas

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De nuevo, en el mundo real las metáforas son muy buenas para demostrar un punto de vista, pero en Internet la gente suele comenzar a usarlas y desviarse del tema rápidamente. Piensa en todas las veces que alguien termina diciendo "Es como si Hitler...", esto incluso tiene un nombre, se le llama la Ley de Godwin y dice:

"A medida que una discusión en línea se alarga, la probabilidad de que aparezca una comparación en la que se mencione a Hitler o a los nazis tiende a uno".

Se dice que quien usa la comparación pierde el argumento, pero todos sabemos que las reglas están para romperse y en Internet muchas veces la persona que lo usa es a la que los demás le dan la razón.

Sustenta tu evidencia

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No puedes argumentar con buenas intenciones. Necesitas conocer el tema, saber cuáles son tus armas y métodos de defensa. Cualquiera puede abrir una página de Internet y buscar una respuesta, pero quienes realmente conocen el tema pueden dar respuestas claras y sencillas. Eso también es importante, no le des vueltas al asunto, escribir un ensayo para demostrar un punto no es algo que la gente espera en un comentario en Facebook o bajo una foto en Instagram. 

No caigas en provocaciones y no te burles

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Las piedras angulares de todos los comentarios negativos en Internet. Si caes ante las provocaciones, los insultos y las burlas, caerás justo donde ellos quieren. Tienes la opción de dejar de contestar, mucha gente no lo soporta, porque necesita saber que tiene la razón, pero si aprendes a hacerlo, te darás cuenta que muchas veces no vale la pena discutir en Internet. 

Si puedes evitar discutir en Internet, sobre todo acerca de temas sensibles, es mejor que lo hagas, pero si necesitas expresarte recuerda que estas reglas te ayudarán mucho. Con ellas y con sentido común puede que logres evitar la furia de los troll que se alimentan de la negatividad, pero si no es así, siempre puedes dejar de contestar y no sentirte culpable después de eso.