Alarma sanitaria por tos convulsa: ¿cómo identificar síntomas y evitar contagios?. El último Boletín Epidemiológico Nacional encendió la alarma por el aumento sostenido de casos de una enfermedad respiratoria altamente contagiosa que ya provocó cinco muertes de menores en la provincia de Buenos Aires.
Según el informe, hasta la semana 42 de 2025 se confirmaron 382 casos en Argentina sobre 3.589 sospechas, con predominio de la bacteria Bordetella pertussis en más del 84% de los afectados. Las jurisdicciones con mayor circulación son la Provincia de Buenos Aires, la Ciudad de Buenos Aires y Tierra del Fuego.
El Ministerio de Salud bonaerense advirtió que este incremento coincide con una baja en la cobertura de vacunación, lo que eleva el riesgo de transmisión, especialmente en lactantes y grupos vulnerables. Cuatro de las víctimas, de entre un mes y dos años, no habían recibido ninguna dosis de la vacuna, pese a encontrarse en edad de aplicación. El quinto caso correspondía a un recién nacido cuya madre no fue inmunizada durante el embarazo.
Qué es la coqueluche o tos convulsa
La coqueluche es una enfermedad infecciosa aguda causada por la bacteria Bordetella pertussis. Se caracteriza por ataques de tos intensos y prolongados. Aunque puede afectar a personas de cualquier edad, los bebés menores de 6 meses son los más vulnerables.
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Cómo se contagia la tos convulsa
La transmisión se produce a través de gotitas respiratorias que se liberan al toser, hablar o estornudar.
El contagio es especialmente alto en los primeros días de tos y puede extenderse hasta seis semanas si no se inicia tratamiento. Con antibióticos, la transmisibilidad disminuye a partir de los 5 días.
Un punto clave es que adolescentes y adultos pueden presentar cuadros leves o casi sin síntomas, pero seguir contagiando, representando un riesgo para bebés y niños pequeños.
Período de incubación y evolución de la enfermedad
El período de incubación dura entre 5 y 21 días, y la enfermedad suele transitar tres etapas:
- Fase catarral
Se parece a un resfrío común: fiebre baja, congestión nasal y tos seca, que empeora por la noche.
- Fase paroxística
Aparecen episodios de tos intensa e incontrolable, seguidos de una inspiración profunda con sonido tipo “gallo”.
Puede causar vómitos, apneas o desmayos, especialmente en bebés.
- Fase de convalecencia
La tos disminuye, pero puede persistir durante varias semanas.
Síntomas de la tos convulsa
- Tos seca persistente (que luego se intensifica)
- Tos en accesos o ataques repetidos
- Inspiración con sonido agudo (“gallo”)
- Dificultad para respirar
- Vómitos después de los episodios de tos
- En bebés: pausas respiratorias (apneas), coloración azulada y debilidad
- En adolescentes y adultos pueden ocurrir fracturas de costillas por la intensidad de la tos, pérdida de peso, fatiga extrema y neumonía secundaria.
Cuáles son las posibles complicaciones
Las complicaciones graves incluyen:
- Neumonía
- Convulsiones
- Hemorragias
- Deshidratación
- Daño neurológico por falta de oxígeno
Por este motivo, la previsión más importante es la vacunación.
Prevención: esquema de vacunación recomendado
La vacuna contra la tos convulsa está incluida en el Calendario Nacional y es gratuita. El esquema es:
- 3 dosis a los 2, 4 y 6 meses
- Refuerzo a los 15-18 meses
- Refuerzo a los 5-6 años
- Refuerzo a los 11 años
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