En este siglo XXI, muchos niños viven con el trauma de la guerra: ¿cómo ayudarlos?, ¿acaso son una generación que crecerá con duros traumas?

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Los niños y cómo recuerdan las guerras

Más allá de las heridas, los niños quedan con recuerdos muy duros. La visión infantil de una guerra muestra destrucción, a la vez que la sensación de desprotección. Hay niños que pierden sus juguetes, sus casas, que ven morir a familiares.

Si bien los niños tienen capacidad de recuperarse, sucede que esa recuperación depende mucho de cómo se manejan los recuerdos. A su vez, del tipo de experiencia. Las guerras son complejas, una forma de violencia más allá de las armas.

Los niños crecerán con eso: haber pasado una infancia entre la destrucción. Esta violencia se manifiesta en miedos, en pérdidas, en zozobra, en la sensación de indefensión. ¿Qué hacer? ¿Cómo ayudarlos a sobrellevar la vida?

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Fuente: Getty Images

Los traumas de los niños en las guerras

Muchos niños ha sido desplazados en Ucrania. En Gaza, los pequeños han sido heridos, perdido sus hogares, vieron morir a sus familiares (padres, hermanos, etc.), padecido hambre, vejaciones, han sido reclutados o cometido actos de violencia para sobrevivir.

Un niño sabe que esa guerra lo ha cambiado todo. Sabe que otros niños no tienen ese sufrimiento: que van a la escuela, que juegan, que no tienen miedo de morir cada noche. Eso incuba un sentimiento de recelo y sensación de haber sufrido injusticias.

Pero, no todos los pequeños crecen con el trauma en la misma intensidad. Por ejemplo, si el chiquillo tuvo un cuidador paciente y atento durante los malos momentos, todo se vuelve mejor, más tolerable y el trauma es menor. ¡Pero no siempre sucede!

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Fuente: BBC

Algunas consideraciones sobre los traumas infantiles por guerras

Se tiene la experiencia de niños que sobrevivieron a las guerras mundiales. Al crecer, desarrollaban rencores y cierta incapacidad para “perdonar”. Este es un peligro, ya que siguientes generaciones pueden ser conflictivas.

- Hay que aceptar que la vida no será la misma para estos niños. El trauma de la guerra es un giro radical, que permanecerá en su memoria.

- Los niños pierden el tejido de su vida cotidiana: amigos, escuela, etc.

- Estos niños deben recibir ayuda: que no repliquen la violencia que padecieron.

- Los sentimientos son importantes. Los pequeños crecen con enconos, con tendencia a ser violentos, a reaccionar como si siempre estuvieran en peligro. Algo que se debe atender para que puedan adaptarse a la sociedad.

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¿Qué les depara a los niños que crecieron en guerra? Es un asunto que se debe reflexionar. Hay guerras en nuestra época, que pueden tener repercusiones en las generaciones venideras.

Fuente: apnews.com.