Aldi Novel Adilang nunca creyó que algún día sería famoso. Lo que comenzó como un día normal en el trabajo se convirtió en un naufragio que lo llevó a estar 49 días navegando a la deriva por el Océano Pacífico, sobreviviendo a base de pescado y agua de mar y siendo ignorado por los barcos que pasaban a su alrededor. Su historia se hizo viral, y el video de su rescate recorrió todo el mundo.

El joven indonesio de 18 años era el guardián de un rompong, como se le denomina a una balsa de pesca de madera que tiene una cabaña en la parte superior. El mismo estaba amarrado a unos 125 kilómetros de la costa de Sulawesi del Norte, anclado al lecho marino por una soga.

En un día de mucho viento, la soga que amarraba a la pequeña cabaña flotante se cortó y Aldi quedó a la deriva. Tenía pocas reservas de comida que le duraron apenas unos días, y sobrevivió pescando, quemando leña de su cabaña para cocinar y bebiendo agua de mar a través de su ropa para filtrar su sal.

Pero también contaba con una biblia, la cual fue crucial para la supervivencia del joven. Aldi le dijo a los medios que creía que "iba a morir por ahí", y aseguró haber pensado en quitarse la vida saltando al océano. En estos momentos de desesperación y oscuridad, recordó los consejos de sus padres quienes le inculcaron orar en momentos de angustia. La biblia fue su ayuda para superar la adversidad.

Lo que sumó a su desesperación fue la cantidad de embarcaciones que pasaron a su lado y lo ignoraron. "Cada vez que veía un gran barco, creía tener esperanzas, pero más de 10 barcos pasaron y ninguno de ellos se detuvo ni vio a Aldi", dijo Fajar Firdaus, diplomático indonesio del consulado en Osaka al diario Jakarta Post.

Finalmente, fue rescatado por un barco de bandera panameña frente a la isla de Guam el 31 de agosto, regresando a Indonesia a principios de este mes. Su video y su historia conmovieron a millones de personas en todo el mundo, que consideran a Aldi un ejemplo de lucha.

Alfian Adilang, el padre del adolescente, dijo que la familia está maravillada con el regreso de su hijo pero furiosa con su empleador. Todos daban por muerto al joven, pero su tenacidad y sus creencias religiosas lo ayudaron a sobrevivir su inolvidable aventura.