Estudio: la pandemia aceleró el envejecimiento cerebral, incluso sin contagio: una nueva investigación científica demostró que la crisis sanitaria mundial de covid-19 dejó secuelas profundas incluso en quienes no se contagiaron. El aislamiento, la incertidumbre y el estrés aceleraron el envejecimiento cerebral, especialmente en adultos mayores y personas en situación vulnerable.
La pandemia dejó marcas invisibles en el cerebro
A cinco años del inicio de la pandemia de covid-19, nuevos estudios siguen arrojando luz sobre sus impactos a largo plazo. Más allá del contagio del virus, los científicos están analizando cómo el contexto de aislamiento, miedo e incertidumbre afectó la salud mental y neurológica de millones. Un reciente estudio de la Universidad de Nottingham, en Reino Unido, reveló un dato inquietante: el cerebro envejeció más rápido durante los años de pandemia.
Según los investigadores, el cerebro de personas sanas que vivieron la pandemia envejeció en promedio 5.5 meses adicionales por cada año transcurrido desde 2020. Este dato surge del análisis de más de 900 escaneos cerebrales del UK Biobank, una base de datos médica del Reino Unido. Sorprendentemente, este efecto se observó incluso en personas que nunca se contagiaron de covid-19.
Aislamiento, estrés y desigualdad: factores determinantes

El equipo identificó que el envejecimiento cerebral fue más pronunciado en hombres, adultos mayores y personas de entornos socioeconómicos vulnerables. El estrés prolongado, los cambios abruptos de rutina y la falta de contacto social jugaron un papel central en esta aceleración. “La salud cerebral también depende de nuestro entorno y nuestras condiciones de vida”, afirmaron los autores.
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¿Qué significa tener un cerebro más viejo?
Para estimar la edad cerebral, los científicos utilizaron inteligencia artificial y aprendizaje automático, comparando los escaneos con miles de cerebros sanos. Así determinaron cuánto más viejo parecía el cerebro respecto a su edad cronológica. Aunque no se observó deterioro cognitivo significativo en personas no infectadas, quienes sí tuvieron covid mostraron un descenso en pruebas de memoria y procesamiento mental.
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