Si eres de los que aman mirar el cielo por las noches y sorprenderse con todas las bellezas del espacio exterior, este pastel te encantará.

La combinación de colores brillantes te recordará a las galaxias y hará, sin lugar a dudas, que el momento de compartirla se convierta en un verdadero lujo.

Este pastel es ideal para niños soñadores, que disfrutan jugando con masa galáctica o embotellando una nebulosa. ¡Anímate a hacerlo!

Para la cobertura galaxia: 

Para el bizcocho: 

Para la decoración en espejo: 

*Recuerda que debes usar productos especialmente diseñados para ser comestibles, de lo contrario puede ser muy peligroso.

Preparación

1. Para el bizcocho, bate los huevos. Añade el azúcar poco a poco sin dejar de batir. Sigue batiendo durante dos minutos más y pasa la harina por un tamiz. Añade un poco de esencia de vainilla y mezcla integrando bien; de manera suave.

2. Enmanteca y enharina un molde para pastel. Vierte la preparación y cocina en horno a 180° hasta que al pincharlo, el palillo salga limpia. Deja enfriar. 

3. Para preparar la cobertura galaxia, pon en un recipiente el agua caliente y añade la gelatina hasta que no queden grumos. Agrega luego la leche fría, la leche condensada y la crema. Integra bien. Bate con batidora por 5 minutos. 

4. Para armar tu pastel, toma el bizcocho horneado, córtalo por la mitad de manera horizontal y pon la parte de la base en un molde desmontable para torta que sea más grande que tu bizcocho. Añade la mitad de la preparación de cobertura y mételo en el congelador por 4 minutos. Quítalo, pon la otra parte del pastel encima y vierte la segunda mitad de la preparación. Colócalo en el congelador por 1 hora y media. 

5. Para la decoración, mezcla el cuarto de taza de agua con la gelatina y déjalo reposar por 5 minutos. 

6. En una olla agrega el azúcar, el agua y la leche condensada. Cuando comience a hervir, añade la gelatina. Mezcla hasta que se disuelva. Luego, quita la olla del fuego y agrega el chocolate blanco. Mezcla hasta que se integre bien.

7. Divide esta preparación en distintos recipientes de acuerdo a la cantidad de tonos que hayas escogido utilizar. Pon un poco de colorante y diamantina comestible en cada una. Revuelve bien y una vez que la preparación esté a temperatura ambiente, quita el pastel del congelador y colócalo sobre una base que lo mantenga alto para que pueda escurrir el exceso de colorante cuando lo decores.

8. En otro recipiente, vierte de a poco los distintos tonos hasta que se vayan combinando entre sí. ¡No los mezcles con una cuchara!

9. Vierte esta preparación por encima del pastel y llévalo al congelador por 20 minutos. 

¡Y listo!