Contenedores de reciclaje: Tipos, colores y cómo hacerlos

El compromiso de respeto por el medio ambiente exige una serie de actuaciones que sirven para preservar el entorno natural. Y para lograrlo, entre muchas otras herramientas, existen los contenedores de reciclaje con sus variantes de colores que corresponden a los distintos tipos de residuos. Esto quiere decir que la basura debe ser clasificada y depositada en el cubo que corresponde para luego ser procesada correctamente. La tarea de los contenedores es sencilla e incluso podemos hacerlos en casa.

La práctica del reciclaje se puede evitar la acumulación de residuos y la creación de nuevos. Esto representa un ahorro energético y económico importante, ayudando a disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero. De hecho, es uno de los mayores restos que debe afrontar la sociedad actual para lucha contra la degradación del medio ambiente.

Es importante adquirir conciencia sobre la gran importancia del reciclaje y realizar esta actividad de forma asertiva. Por todo esto, debemos saber cómo identificar los contenedores de reciclaje y de que trata cada uno de ellos.

Contenedores de reciclaje ¿Cuáles son?

Existen diferentes tipos de contenedores, cada uno con una función particular para la recolección de desechos. Los hay para reciclar el plástico, aluminio, cartón, vidrios, cobre, etc. También está el que se encarga de recibir todo el material orgánico que podrá ser utilizado como abono para las plantas.

De igual manera está el que recibe vidrios, los que recolectan la basura doméstica y aquellos que se utilizan para depositar residuos tóxicos y peligrosos. Cada contenedor tiene su propósito y asimismo tiene un color característico para que las personas puedan clasificar la basura.

Colores de los contenedores de reciclaje

Contenedores de reciclaje: Tipos, colores y como hacerlos

Los diferentes contenedores de reciclaje se identifican de acuerdo a su color, cada color representa un tipo de material específico. Esto le facilita a las persona que pueda contribuir a conservar el medio ambiente reciclando la basura que produce a diario.

A continuación conoceremos los distintos contenedores de reciclaje que existen según su color:

Contenedores azules: son los adecuados para depositar papel y cartón. La utilidad de estos contenedores es enorme ya que estos materiales representan aproximadamente el 18% del total de la basura que generamos. En este tipo de contenedor se puede almacenar cualquier tipo de tipo de cartón como cajas, envases de cartón y cualquier tipo de papel como revistas, periódicos, folletos, documentos, papeles para envolver, etc.

Siempre que sea posible, las cajas de cartón y el papel se deben plegar con el fin de ocupar menos espacio dentro del contenedor azul y dar cabida a más residuos.

Contenedores verdes: también conocidos como iglú verde, son los correspondientes para almacenar vidrio. Una característica sorprendente del vidrio es que puede ser 100% reciclable y no pierde jamás sus cualidades iniciales. Por cada envase de este material que se recicla se ahorra la energía necesaria para que un televisor se mantenga 3 horas encendido.

Dentro del contenedor verde se pueden depositar botellas de vidrio, cristales rotos, trozos de espejos, tarros, entre otros. En esta categoría no se incluyen materiales como la cerámica o porcelana. Antes de arrojar el recipiente o botella de vidrio al cubo se le debe quitar la tapa y depositarla en su contenedor correspondiente.

Contenedores amarillos: están destinados para reciclar plásticos, latas y envases. En estos tipos de contenedores se debe depositar todo material que este hecho de plástico y de metal.

Puede que esta categoría sea una de las más complicadas por la cantidad de material que se puede reciclar en ella. Pero en líneas generales, podemos arrojar en estos cubos, envases de plásticos, envases de alimentos, briks de leche, bolsas de plástico, latas de refrescos y de conservas entre otros.

Sin embargo, hay que tener cuidado de almacenar en el contenedor amarillo productos de plástico o metal que no son envases. Por ejemplo; cintas de video, los CDs o juguetes de plásticos.

Contenedores naranjas: o también conocidos “contenedores orgánicos” son los adecuados para almacenar desechos de origen animal o vegetal. Algunas veces estos contenedores pueden ser de color marrón y cumplen la misma función. La basura que se puede colocar en el son los restos de comida y alimentos como frutas, cascaras, huesos, hojas etc. Al igual que restos de platas como, ramas, raíces, flores, hojas, etc.

En caso de no disponer de este tipo de contenedor se debe utilizar el de color gris.

Contenedores gris: se utilizan para almacenar la basura doméstica y desechos que no encajan en otras categorías. También resultan adecuados para depositar los residuos orgánicos cuando no hay un contenedor naranja disponible.

Contenedores rojos: aunque no se suele encontrar en los núcleos urbanos con frecuencia, estos contenedores también tiene una tarea especial. Se encargan de contener residuos tóxicos y peligrosos. Entre ellos se incluyen baterías, pilas, desechos hospitalarios, aerosoles, insecticidas y productos tecnológicos.

Reciclar en casa: tipos de contenedores

Reciclar en casa en muy importante y fácil de hacer, para ello se debe contar con tantos cubos de basura o bolsas como tipos de materiales que se desechan. También se debe conocer qué tipo de basura va en cada uno de ellos, y como ya lo sabemos, solo queda hacer uso de ellos.

Los contenedores de reciclaje para uso doméstico tienden a ser un poco más pequeños para facilitar su colocación en espacios de la casa. De hecho, algunos de ellos están puestos unos sobre otros en forma de gavetas. Y por lo general los colores que tiene son; azul para el papel y cartón, verde para el vidrio, amarillo para el plástico, marrón para los desechos orgánicos y gris para materiales no reciclables.

¿Qué puedes reciclar en estos contenedores? Para darte una idea, el 90% de la basura que produces a diario es reciclable. Por lo que en estos contenedores puedes depositrar lo siguiente.

Contenedor	Tipo de desecho
Azul	Cartones de huevo, bolsas de papel, folios, periódicos, revistas, sobres, carpetas de cartón y cartulinas.
Amarillo	Envases de productos lácteos, hueveras de plástico, tapas y tapones de plástico, latas, papel aluminio, bolsas de plásticos, platos y vasos desechables, envases de productos de limpieza, bandejas de corcho blanco.
Verde	Botellas de vidrio de cualquier color, frascos de conserva, recipientes y tarros de vidrio de cometería y perfumería.
Marrón	Restos de comida animal o vegetal, hojas, flores, ramas, raíces, cascaras de huevo
Gris	Todo material que no esté incluido en las otras categorías y que no sean reciclables.

Consejos para reciclar basura en casa:

Trata de adecuar tu consumo a tus necesidades y a las del planeta, evita comprar productos de más. La mejor manera de no tirar plástico es no utilizarlo, si adquieres solo lo que vas a utilizar evitarás generar toneladas de residuos.
Haz lo posible por tirar la menor cantidad de basura, una vez que desocupes envases o botellas puedes preguntarte si es realmente un desecho o puedes hacer algo con ellos. Reutilizar y readaptar puede evitar que lo usado se convierta en basura.
Separa correctamente los desechos, cada material de basura pertenece a un contenedor en específico.
No te excuses en la falta de contenedores para no reciclar, si en la zona donde vives no los hay avisa al ayuntamiento y arma los tuyos propios en casa.

¿Cómo hacer contenedores de reciclaje en casa?

Los cestos o contenedores de reciclaje también se pueden hacer en casa y son una de las manualidades que ayudan a reducir la contaminación ambiental. A continuación te daremos algunas ideas de bajo costo.

Contenedores reciclados con botellas de plástico: solo necesitas las botellas con sus tapas, y algunas herramientas como alicates y encendedor, también requieres de un poco de alambre y de uno o varios aros de varilla de metal (se pueden conseguir en la ferretería).

Construye tu cesto del tamaño que quieras colocando botellas sobre otras y fijándola con los alambres y los aros.

Contenedores con tapas de plásticos: recicla todas las tapas de gaseosa que puedas. Arma tu contenedor utilizando la misma idea que te dimos anteriormente pero sin usar los aros de metal.

Contenedores con cajas de cartón: son la idea más sencilla y práctica, utiliza cajas que ibas a desechar en la basura y colócale una bolsa plástica. Cuando ya estén muy deterioradas las desarmas y colocas en el contenedor azul de la zona donde vives.

Contenedores con cubos de basura: compra los botes de desechos que tradicionalmente usas en casa. Píntalos de colores o colócale un identificador para que clasifiques la basura, ¡y listo!