Con una rodada de más de 23 kilómetros del Zócalo (la plaza central de México Distrito Federal) a los humedales de Xochimilco, terminó este fin de semana el Sexto Foro Mundial de la Bicicleta (FMB6). Este evento relativamente nuevo nació en Porto Alegre (Brasil) en 2012, cuando durante un acto de la Masa Crítica local, unos ciclistas fueron atropellados por un automovilista y los activistas se dieron cuenta que hacía falta promover una toma de conciencia general sobre el uso de la bicicleta en la sociedad.
Ahora este Foro llegó hasta la ciudad de México, emblema mundial de la congestión vial y la contaminación ambiental.

Pero sopla un viento nuevo en México, o debemos decir Ehecatl, el dios del viento según los antiguos Aztecas. Y quién mejor para contar sus experiencias que Areli Carreón, activista de la organización Bicitekas y recién elegida alcaldesa mexicana de la bicicleta, un cargo honorario para promover la cooperación entre ciudadanos, gobierno e iniciativa privada para que la ciudad sea más segura para la bici.

Areli Carreón: “Nos hemos dado la divertida de la vida", dice Areli, una mujer feliz de unos cuarenta y piedras, oriunda de Cuernavaca y madre de dos simpáticos chamacos, que ella suele transportar en su triciclo tuneado.

Areli cuenta sobre las actividades del Foro que arrancó con la llegada de nada menos que 200 llamados bici-viajeros provenientes de países diversos como Bélgica, Holanda, Austria, Argentina, Bolivia, Colombia y Brasil, que se reunieron en la Ciudad Universitaria, un complejo estudiantil enorme.



¿Fue un reto organizativo recibir tanta gente?

Areli Carreón: “En la ciudad de México hemos construido un comité organizador de más de 80 personas que trabajaron de forma voluntaria desde casi un año para organizar este evento ciudadano gratuito. Más de 16,000 personas, de un total de 33 países tomaron parte en las 137 actividades que integraron el programa oficial del FMB6, incluyendo rodadas masivas, tres días de conferencias, actividades deportivas, talleres para funcionarios públicos, y un amplio programa cultural.”

¿Talleres para funcionarios públicos? Suena como el mundo al revés que los ciudadanos tengan que enseñar a los servidores públicos sobre la convivencia vial. Pero Areli y su compañero de lucha, el actual presidente de Bicitekas, Agustín Martínez, tienen años de gestión pública y han alcanzado logros importantes.

Areli Carreón: “El gobierno de la ciudad de México aprovechó el evento para publicar el Programa Integral de Seguridad vial. Esto es un hito en la lucha por la seguridad vial en México, pues nunca antes ninguna otra ciudad ha tenido un Programa tan profesional, basado en las mejores prácticas internacionales”

La buena relación entre Bicitekas y el gobierno local anteriormente había desembocado en el nuevo Reglamento de Trafico (2015) que por primera vez contemplaba la existencia de ciclistas, seres extraterrestres que no se transportan en cuatro, sino en dos ruedas. Areli, Agustín y Bicitekas han luchado años para que el gobierno de la ciudad de México construya bicisendas.

Areli Carreón: “Ahora, a raíz del Foro Mundial de la Bicicleta ahora se logró balizar 22 kilómetros de nueva infraestructura vial para ir en bicicleta a la Universidad Nacional (UNAM)”, dice Areli. “Es muchísimo, si piensas que en 10 años la ciudad solo ha logrado construir 140 kilómetros. Además la UNAM construyó varios bici-estacionamientos dentro de su perímetro”.

Sin duda, ayuda la coyuntura actual, con las noticias sobre el calentamiento global; los gobiernos locales en todo el mundo se muestran más permeables a las ideas de transporte sustentable. Así, en la ciudad de México, como en tantas otras ciudades, también se ha instalado un sistema de préstamo gratuito de bicicletas.

¿Se nota el avance de la bicicleta como transporte alternativa en la mejoría de la calidad del aire del DF?

Areli Carreón: “El uso de la bici ha crecido enormemente, pero el de los autos también”, dice una Areli realista, “cosa que no permite ver avances significativos ni en calidad de aire ni en la reducción del tiempo perdido en la congestión”. “Es imprescindible impulsar incentivos negativos al uso del auto como parquímetros, a la par en que se invierte en transporte público de calidad. No puede ocurrir solo la promoción de la bici: debe promoverse un cóctel de soluciones al mismo tiempo”. 

Por eso, el Foro terminó con un acto chido en la hermosa plaza de Santa Domingo y una función de poca madre de Lucha Libre en el templo del catch mexicano, la legendaria arena del Coliseo. Ahí, ante el deleite de ciclistas y ambientalistas, los malos o rudos se enfrentaron a unos vengadores ciclistas enmascarados. Un evento salpicado de simbología y humor mexicano.

La última noticia sería que el FMB7 se realizará en Lima (Perú) en 2018.

¿Quién se anima a rodar hasta las tierras Inca? ¡A engrosar esas pantorrillas!

Tom Dieusaert
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