Muchas personas sufren ansiedad social, así que, si estás leyendo este artículo porque crees que la tienes, no deberías sentirte mal.

Lo más probable es que si has buscado ayuda para superar la ansiedad social, te has topado con grandes dificultades y has notado que la solución no es sencilla. Aun peor, probablemente has recibido la misma información poco útil una y otra vez en fuentes distintas.

Las estrategias para superar la ansiedad social son varias, pero casi todas son demasiado complejas o desafiantes para quien busca ayuda. Por eso, hoy trataremos de superarla con una respuesta a una pregunta que parece algo tonta.

Lo que pasa por la cabeza de una persona con ansiedad social es el sobre-análisis de todas las situaciones en la que se encuentra, incluso en los casos más triviales e insignificantes. Esto causa una incomodidad tal que, puede dejarlos pensando y lamentándose por días.

[Lee también: Cuáles son los síntomas de la ansiedad y 5 formas de luchar contra ella]

Una nueva técnica para apaciguar los síntomas de la ansiedad social consiste en tres pasos.

  • El primer paso es ser consciente de los pensamientos ansiosos que se encuentran en tu cabeza, dejar que tu mente hable y exprese todo lo que la agobia y teme. Reconócelo.
  • El segundo paso es tratar de analizar todo lo que puede darse después de ciertas situaciones. Deja que tu mente exagere, déjala imaginar los peores escenarios posibles.
  • El último paso te llevará a la salida por medio de una pregunta aparentemente tonta: “¿Y qué?”.

[Lee también: Ansiedad: esto es lo que NO deberías hacer si quieres sentirte mejor
]

Lo que busca esta técnica de la pregunta es hacerte ver que no importa la situación en que te has encontrado. ¿Y qué?, no morirás por haberte puesto alguna ropa que no te quedaba bien en alguna fiesta, o por haber dicho algo que parecía sin importancia en medio de una conversación.

Algo que hay que tener en cuenta es que las personas que sufren de ansiedad social no están entrenadas para ser expertas en conversaciones o situaciones de exposición.

Trata de entrenarte de esta manera, deja que tu verdadera personalidad hable y se exprese, y si en algún momento te encuentras con esa voz en la cabeza, solo recuerda “¿Y qué?”, el mundo seguirá girando sin importar lo que suceda.

[Lee también: 10 afirmaciones que deberías repetirte a diario para superar la ansiedad]